“Estoy bien. Físicamente bien y mentalmente también”, declaró Cendón a Efe por teléfono un día después de su liberación desde la residencia del embajador de España en Nairobi, que para él supone “un cambio importante después de pasar esos cuarenta días en las montañas de Somalia, pues se agradece un buen desayuno y una cama”.
En esas casi seis semanas, en las que han comido sobre todo arroz y cordero, los secuestradores, miembros de un clan tribal del norte de Somalia, según fuentes locales, han tenido a Cendón y al periodista británico Colin Freeman, junto al que trabajaba en un reportaje sobre piratas somalíes, “moviéndonos de cueva en cueva”.
“Unos días en una cueva y luego en otra. Nos iban cambiando. No eran cuevas muy profundas, eran para protegerse del frío en medio de las montañas, donde estás básicamente en medio de la nada”, explicó Cendón, un fotógrafo independiente que en esa ocasión trabajaba con Freeman para el diario británico Daily Telegraph.
Para él, pese a la situación de secuestrados, el trato que les han dado sus captores ha sido “razonablemente bueno”, aunque recibieron algunas amenazas de muerte que Cendón, muy tranquilo y relajado tras su liberación, considera que no fueron serias.
“Llegó un momento en que nos conocíamos todos bastante bien. Ellos nos conocían y nosotros ya sabíamos como eran ellos y, al final, hicimos intentos de relacionarnos con ellos, para que les resultara más complicado amenazarte”, comentó Cendón.
“Recibimos alguna que otra amenaza y, sinceramente, yo nunca me las tome muy en serio (...). No hubo ninguna amenaza que yo considerara realmente importante, aunque, obviamente, no es agradable que amenacen con matarte”, apostilló Cendón, quien concluyó que la situación “yo diría que era perfectamente manejable”.
El fotógrafo español no tiene idea de si se ha pagado un rescate por su liberación y la de Freeman: “No tenemos ninguna noticia de lo que ha sucedido en estas semanas de negociaciones y para eso tendrás que contactar al Ministerio de Exteriores o el Daily Telegraph”, dijo.
Según él, los gobiernos de España y el Reino Unido, junto con el periódico británico Daily Telegraph, “son los que nos han sacado de allí y saben como está ese tema” del pago de un rescate.
Cendón y Freeman fueron secuestrados el pasado 26 de noviembre, cuando se dirigían al aeropuerto de Bosaso, la principal ciudad de la región norteña somalí de Puntlandia, tras una semana en la que habían hecho un reportaje sobre los piratas somalíes. Aunque las autoridades han negado que se haya pagado un rescate, Mohamed Ali Suldan, miembro del clan Ali Saleban, al que supuestamente pertenecen los captores, dijo a Efe por teléfono que recibieron “un rescate de 200.000 euros (280.00 dólares)”.