El portavoz municipal del PSOE, Óscar Torres, da por hecho que, más pronto que tarde, el Ayuntamiento de Cádiz se verá obligado a suspender el baldeo de calles y plazas de la ciudad ante la situación extrema de sequía.
Torres ha lamentado que el propio equipo de Gobierno haya reconocido que el proyecto de adaptación de la depuradora compartida con San Fernando para utilizar agua reciclada para estas labores esté en punto cero dos años después de que los socialistas reclamaran el impulso de esta infraestructura y ha considerado escandaloso que se siga utilizando agua potable.
Por ello, el PSOE reclamará al alcalde, Bruno García, en el próximo Pleno ordinario, el 28 de diciembre, que aclaré qué alternativas tiene prevista poner en marcha si es imposible continuar con los baldeos, una vez que se ha sustituido el manual por el mecánico.
Todo ello, ha remarcado, en un contexto de suciedad generalizada en las calles del municipio. “La sensación de la ciudadanía es esta pese al plan de choque puesto en marcha entre junio y septiembre”, ha agregado, y ha anunciado que, precisamente, interrogará al respecto al equipo de Gobierno.
Los socialistas quieren contar con un informe municipal en el que se detallen los objetvios que se perseguía, los criterios utilizados para ejecutarlo y los recursos materiales y humanos destinados.
Torres ha lamentado la falta de información y transparencia y ha instado al equipo de Gobierno a informar a la oposición y a la ciudadanía por medio de la web de todo lo relativo a dicho plan de choque.
En cuanto a las medidas adoptadas para alcanzar un ahorro del 20% en el consumo, de acuerdo al decreto de la Junta de Andalucía y el requerimiento del Consorcio de Aguas de la Zona Gaditana, ha considerado lógico que funcione la rebaja de la presión y pide que se insista en la campaña de sensibilización ciudadana sobre los hábitos domésticos, pero ha advertido de que es preciso tomar nuevas iniciativas, como la señalada sobre el baldeo.
En cualquier caso, ha insistido en que el PSOE se opone de plano a que se suba el precio del agua porque perjudicaría a las familias con menos recursos que son, justo, las que gastan menos.