El sentimiento generalizado tras el pregón del Dios Momo, encarnado este año por el periodista y poeta Juan José Téllez, fue de satisfacción, sobre todo tras el chasco que se llevaron los gaditanos congregados en la plaza de San Antonio con motivo del pregón de Carnaval a cargo del polifacético gaditano Pablo Carbonell.
Un pregón, antes de su quema, que estuvo repleto de buen gusto, de mimo hacia esta ciudad, a la que calificó como la de los dos cantes y de un sinfin de artistas que dieron un plus a su discurso. Entre ellos, David Palomar, Chirigóticas, Pasión Vega o Rosario Cepeda.
Un pregón que tenía pinta de estar pasado por agua, pero finalmente los astros se alinearon para que el Dios Momo pudiera terminar su intervención y se procediera a la ficticia quema en plena plaza. Una noche que se convirtió en magia dentro de los actos de Carnaval.
Grandes artistas
Si algo querían los gaditanos encima del escenario era Carnaval y en la noche del pasado martes, lo tuvieron. Con la intervención de tres grandes y admirados del Carnaval como Antonio Martínez Ares, Antonio Martín y Jesús Bienvenido, la fiesta estuvo servida.
El fuego que simbólicamente acabaría con su figura, siempre de manera retórica, fue el que quiso alimentar Téllez a lo largo de su discurso, por ser el que corre por las venas de los carnavaleros y aficionados. Sin duda, y para librarse del fuego que consumiría al Dios Momo, no hizo más que lo que tan bien se le da, hilar fino con las palabras, utilizar su propia voz para conquistar al respetable, e intentar convencerles de la valía de su discurso, algo que sin duda, fue capaz de conseguir, a pesar de que no le sirviera para librarse de la hoguera, pero yendo hacia ella con la mejor de las sensaciones posibles, haber gustado al público.