La feria de María Auxiliadora se clausuró el domingo después de dejar tras de sí el rastro de tres días y cuatro noches de fiesta en el Barrio Bajo arcense. Mucho tiempo de juerga para simultanearla con numerosas comuniones y otros hechos festivos, pero, bueno, la tradición manda.
Durante la inauguración, con el encendido del alumbrado extraordinario, actuó una charanga popular compuesta por varios músicos de la banda municipal Vicente Gómez Zarzuela, así como estuvieron presentes las molineras del carnaval. El alcalde, José Luis Núñez, aprovechó para desear un buen fin de semana de convivencia a los vecinos, a la espera de que las actividades y actos oficiales fueran del agrado de los ciudadanos. Asimismo, definió la velada como “la feria chiquita” por su carácter entrañable, a la vez que destacó cómo se ha mejorado este año el alumbrado público.
El Ayuntamiento procuró poner en marcha algunas novedades en su afán de mejorar la feria, de ahí la instalación de dos casetas municipales, una de ellas exclusiva para la juventud donde se recogieron sus gustos musicales y su ambiente, y una segunda instalada en La Caridad para todos los públicos. En esta última se sucedieron las actuaciones de algunos grupos locales por los que la Delegación de Fiestas ha apostado para animar sobre todo las noches: Trío de Joaquín Moreno y los grupos Jonás y la banda del Patio, Clave Calé, Dumaya y Son Flamenco, además de la orquesta Casabianca fueron algunos ejemplos. Además, hubo paseo de caballos en colaboración con las asociaciones ecuestres El Parón y Curro Calderón. Fueron algunos los jinetes que se acercaron al recinto ferial para darle cierto realce con sus caballos, pero ciertamente se echaron en falta a muchos aficionados.
El ambiente se trasladó durante la mayor parte de la feria a los numerosos y buenos bares del barrio, mientras que otros, por aquello de la novedad, se aprovecharon del ambiente de la caseta municipal. En este sentido, destacó la visita de algunos grupos de mujeres, desde asociaciones hasta el colectivo parroquial de María Auxiliadora, así como las reuniones de amigos y familiares que encontraron en la feria la ocasión idónea para su reencuentro.
En la parte negativa, pese a que el balance de la Policía Local es muy positivo, hay que destacar el fallecimiento de una mujer de unos 40 años, a la que le sobrevino al parecer un infarto en plena feria que acabó con su vida casi fulminantemente; un desgraciado hecho que provocó cierta consternación en la feria al propagarse la fatal noticia.
En el lado religioso, la salida procesional de la Virgen patrona del barrio llenó de emoción la plaza Modesto Gómez para contemplar la salida procesional de María Auxiliadora. El ambiente fue el tradicional, con la feligresía, vecino y niños de comunión acompañando el desfile, aderezado con los sones de la banda municipal de música Vicente Gómez Zarzuela.
