El grupo automovilístico Ford ha decidido cerrar en 2014 su planta belga de Genk, y trasladar la producción de estas instalaciones a la factoría valenciana de Almussafes, según indicó Luc Prenen, representante de los trabajadores de la fábrica de Bélgica.
Prenen avanzó que la intención de la compañía es trasladar la producción de los modelos Mondeo, S-MAX y Galaxy a la factoría de Almussafes, si bien esta planta produce actualmente vehículos de otras plataformas.
El responsable sindical, perteneciente al sindicato ACV, realizó estas declaraciones tras mantener una reunión con la dirección de la fábrica de Genk en la que se les trasladó la decisión de poner fin a las operaciones en estas instalaciones.
"La dirección ha decidido cerrar la planta de ensamblaje y las actividades de prensado en Genk al final del actual ciclo de producto, que terminará en 2014", expuso el sindicalista, quien habló a los trabajadores a través de un megáfono.
Según sus datos, la decisión de poner fin a estas operaciones supondrá el cierre de las instalaciones y la pérdida de 4.300 puestos de trabajo.