Los blanquinegros dominaron el choque desde el pitido inicial, sin conceder apenas oportunidades a los sevillistas que vieron como eran superados en todas las facetas del encuentro. Además, la superioridad fue transformada rápidamente en forma de goles, con los tantos de Romerito y Copi, dejando el choque prácticamente sentenciado cuando apenas se había jugado media hora.
Tras el descanso los locales lo intentaron, pero la defensa balona no fue nada permisiva y se imponía en cada balón que los habilidosos delanteros sevillanos trataban de controlar, creando escaso peligro a lo largo del choque.
Otro gol más de Copi y y otro de de Bello para cerrar la cuenta cuando faltaban 20 minutos para el final, daban tres puntos muy merecidos a los de Escobar, que ya piensan en recibir la próxima semana a un Cádiz necesitado de puntos ante el titubeante comienzo liguero que está haciendo, en lo que será el primer derbi provincial del año.