Según Delgado, en las poblaciones similares a las de Chiclana donde son responsabilidad de un comandante “se ha propuesto esta fórmula porque existe un mayor nivel de delincuencia que aquí”. El capitán insistió en que la delincuencia en el municipio “está bastante estabilizada” y en unos niveles “aceptables”, por lo que “los mandos no han considerado un comandante para Chiclana”.
Delgado quitó importancia a qué mando lleve la jefatura del acuartelamiento indicando que “con un comandante hay más carisma, pero el trabajo es el mismo y lo hacen las mismas personas”.
Por su parte, el alcalde puntualizó que “queremos la consolidación de la Guardia Civil en Chiclana y que se siga manteniendo la posición prominente en la provincia, remarcándose la cadena de mandos. Seguimos apostando por la Guardia Civil”. Román, en declaraciones a este medio durante la celebración del día de la patrona de la Guardia Civil, la Virgen del Pilar, se mostró favorable a que fuera un comandante el responsable de la compañía de la Guardia Civil en Chiclana, contemplándolo como una solicitud más que como una exigencia.
El relevo del comandante Arturo Ortega, también capitán mientras fue responsable de Chiclana, subrayó durante el encuentro en la Alcaldía que “la plantilla es estupenda”, cifrándola en más de 130 agentes a los que se suman los de los servicios especiales de Policía Judicial y Fiscal, y los del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona).
A las críticas expresadas por la formación política UPyD, tras una encuentro con representantes de la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), en las que indicaba que el acuartelamiento de Chiclana estaba obsoleto, el nuevo responsable de la Guardia Civil quiso dejar claro que se había encontrado tras su incorporación con unas dependencias en “mucho mejor estado” que cuando las dejó hace cinco años. En este sentido, Delgado destacó que “se han mejorado las viviendas del acuartelamiento, las oficinas, se han separado las áreas” y aseguró que “no hay precariedad”.
Manuel Delgado, que llegó por primera vez al acuartelamiento de Chiclana en 1976 con la graduación de cabo, ha señalado que llega nuevamente “con muchas ganas de trabajar”.