En concreto, actualmente hay 139.758 mujeres víctimas de violencia de género que están protegidas: 42.107 se incorporaron por primera vez al sistema en 2008 y 42.422 el año pasado.
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha ofrecido estas cifras durante su comparecencia en la comisión correspondiente del Congreso para informar sobre las cifras de criminalidad de 2009, un año en el que los delitos de malos tratos en el ámbito familiar se incrementaron un 2,8%, la mitad de lo que aumentaron en 2008.
Estos delitos siguen aflorando, pero el ministro ha querido hacer hincapié en que el crecimiento es “relativamente pequeño” si lo comparamos con cifras de otros años, como las de 2003 o 2004, cuando se tipificaron nuevos tipos delictivos en este sentido.
“Da la impresión –insistió el ministro– de que están dejando de aflorar, que ya ha aflorado lo aflorable y que estamos ya en una situación de un cierto estancamiento”.
Pérez Rubalcaba, que se ha mostrado convencido de que las mujeres “están perdiendo el miedo” a denunciar, ha valorado el aumento del número de víctimas protegidas por los sistemas públicos porque “es una garantía” para que no sean asesinadas, como lo han sido ocho mujeres este año.
Por ello, lanzó un mensaje a estas mujeres: “Es muy bueno para su seguridad que lo hagan saber con denuncias o de otra manera, porque a veces no hay una denuncia formal pero sí hay indicios y temores; estar protegida es mucho mejor”.
En total hay 18.519 guardias civiles integrados en este sistema de protección, junto a 8.917 policías nacionales, 1.258 funcionarios de Prisiones, 2.219 personas de la Fiscalía y 91 de las distintas Unidades de Coordinación y de Violencia sobre la Mujer. Además, hay 34 agentes de distintas policías locales (Oviedo, Córdoba, Logroño, Gijón, Avilés, Mieres y Langreo) que trabajan también con las bases de datos del sistema.