La Unión Sevillana del Taxi, con representación en el Instituto Municipal del Taxi (IMT) del Ayuntamiento hispalense, ha manifestado este viernes su temor ante la posibilidad de que la futura normativa autonómica de vehículos de transporte concertado (VTC), que operan para empresas de alquiler de coches con conductor como Uber o Cabify, suponga una "regulación masiva" de esta actividad a través de un "traje a medida".
En un comunicado, la Unión Sevillana del Taxi ha señalado el real decreto Ley de 2018 por el que el Gobierno central traspasaba la gestión y regulación de los vehículos de transporte concertado a las autonomías y ayuntamientos, para que los mismos regulasen las características y condiciones de sus servicios para en cuatro años, limitar el número de estos coches de empresas como Uber y Cabify; un decreto según el cual en septiembre de este año los mismos quedarán relegados a servicios interurbanos si no pesa antes una regulación autonómica específica en la que la Junta de Andalucía aseguraba trabajar ya hace meses.
Para la asociación, aquel decreto permitió a los VTC "seguir operando en las ciudades con total impunidad, casi equiparando de facto por este periodo dos sectores claramente diferenciados", pues la regulación estatal prohíbe a los VTC captar clientes de manera aleatoria en las vías públicas o circular a la búsqueda indiscriminada de usuarios, entre otros aspectos.
Tras acordar recientemente la comunidad de Madrid que los VTC puedan seguir operando en dicha comunidad más allá del límite de septiembre sin acceder a las condiciones reservadas en exclusiva al taxi, como la recogida aleatoria en la calle o las paradas específicas, la Unión Sevillana del Taxi recuerda que está "a punto de llegar a su fin" el mencionado periodo de cuatro años habilitado mediante el decreto estatal de 2018.
Al respecto, esta asociación de taxistas asegura que "el inmenso lobby de los VTC está presionando a los diferentes gobiernos autonómicos, fundamentalmente en Cataluña, la Comunidad Valenciana y Andalucía, hasta el punto de convocar una reunión de los directores generales de Transporte de las distintas comunidades, que se iba a celebrar ayer, donde el Gobierno Central vería con buenos ojos una regulación masiva" de los VTC en las autonomías, antes de expire el citado plazo de cuatro años y los VTC queden circunscritos al ámbito interurbano en caso de no mediar regulaciones territoriales.
"Si desde las administraciones se intenta con nocturnidad y alevosía hacer un traje a medida a estas multinacionales más allá del 30 de septiembre, el taxi de toda España saldrá a la calle", avisa la Unión Sevillana del Taxi, temiendo un "atropello" al sector.
