UGT ha reclamado aumentar la inversión en salud mental y convertirla en una prioridad, recordando que los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) muestran que cerca de 1.0000 millones de personas en el mundo viven con un trastorno mental, tres millones mueren cada año por el consumo nocivo de alcohol y una persona se suicida cada 40 segundos.
Unos problemas que, tal y como ha avisado la organización sindical, se han visto "agravados" por la irrupción de la pandemia de Covid-19, los confinamientos, el miedo al contagio, la no desconexión en el teletrabajo, así como la incertidumbre ante el futuro o la pérdida de empleo.
"Estos son algunos de los factores que están influyendo en que se den con mayor frecuencia los riesgos psicosociales en el trabajo y que haya un aumento de las patologías asociadas a estos, como el estrés, la ansiedad o el tecnoestrés, entre otros. La salud mental de los trabajadores se han visto seriamente afectada por las situaciones que han vivido debido a la Covid-19", ha señalado el sindicato.
Y es que, no solo los profesionales sanitarios y socio-sanitarios que se han tenido que enfrentar a situaciones "extremadamente difíciles", con altas cargas de trabajo, sometidos a elevadísimos niveles de estrés, además de tener que convivir con el miedo al contagio debido a la falta de equipos de protección individual en los inicios de la pandemia, son los que han padecido problemas mentales, sino también otros trabajadores como los de servicios esenciales, transportistas, del campo, del comercio, personal de la limpieza o de los cuerpos del orden y seguridad del Estado, de emergencias, por enumerar algunos.
"Muchos de ellos desempeñan trabajos con condiciones precarias y con bajos salarios, y han estado expuestos al riesgo de contagio a lo largo de la pandemia. Tampoco, debemos olvidar a aquellas personas que han perdido su empleo, viendo amenazada su forma de vida. Es evidente, que esta situación está y seguirá afectando la salud mental de la clase trabajadora, por lo tanto, es importante que los riesgos psicosociales de origen laboral sean tenidos en cuenta en el ámbito empresarial, se evalúen y se adopten medidas en el seno de las empresas para reducirlos o eliminarlos", han dicho desde UGT.
En este sentido, el sindicato ha recordado que los trastornos relacionados con riesgos psicosociales tienen una alta incidencia en la salud de las personas trabajadoras, como así demuestran, el "elevado" número de fallecimientos por infartos y derrames cerebrales en el trabajo, primera causa de muerte por accidente durante la jornada laboral en España.
Aparte de esto, enfatizan desde UGT, las patologías que causan los riesgos psicosociales apenas tienen reflejo en las cifras de accidentes de trabajo y no se reconocen como enfermedad profesional. Ante este hecho, ha reivindicado la actualización del listado de enfermedades profesionales español, para que sean incluidas las patologías derivadas de los riesgos psicosociales, siguiendo la estela de la OIT que ya lo recoge en su listado de 2010.
De igual forma, ha mostrado su apoyo a la iniciativa de la Confederación Europea de Sindicatos, que adoptó, en su Comité Ejecutivo, una resolución sobre acciones para combatir el estrés y eliminar los riesgos psicosociales en el lugar de trabajo mediante la inclusión de una Directiva de la UE en la agenda política.
"Por todo ello, nos sumamos, en el Día Mundial de la Salud Menta, a la OMS, junto con las organizaciones asociadas United for Global Mental Health y la Federación Mundial de Salud Mental, en la reivindicación de que se aumente considerablemente la inversión en salud mental, para impulsar la acción pública en todo el mundo. Para ello han puesto en marcha la campaña Acción a favor de la salud mental: invirtamos en ella", han zanjado desde UGT.