Varios activistas defensores de los animales han presentado denuncia ante la Policía Nacional de Sevilla como consecuencia del altercado en el que se vieron envueltos la pasada semana con trabajadores del Gran Circo Alaska de Sevilla, ubicado en la Ronda del Tamarguillo hasta el próximo 7 de mayo, en la que hacen constar las "agresiones" que sufrieron por parte de estos empleados en forma de "empujones" y "puñetazos".
En la denuncia, consultada por Europa Press, los activistas recuerdan cómo todo sucedió a raíz de una concentración en las inmediaciones del circo, tras obtener autorización por parte de la Subdelegación del Gobierno, en la que empezaron a repartir folletos editados para concienciar al público asistente a la función y que, en una primera fase, transcurrió "con absoluta normalidad".
Ésta, sin embargo, se tornó en "situación hostil" al ser recibidos por "quienes aparentaban ser personal de seguridad de dicho circo", que advirtieron a los manifestantes de la imposibilidad de permanecer en aquel lugar bajo la recriminación de "molestar a los asistentes".
Después de que ambas partes comenzaran a grabarse mutuamente, uno de los trabajadores, según la denuncia, arrebató el teléfono móvil a un activista, dejándolo caer al suelo, siendo éste el momento en el que se desencadenaron las agresiones reseñadas, por las que hasta cinco manifestantes habrían precisado atención médica. El incidente finalizó con la intervención de la Policía.
Los activistas aseguran tener organizada y autorizada otra concentración a las 16,30 horas de este domingo en el mismo lugar, habiendo solicitado asistencia policial.
LA VERSIÓN DEL CIRCO
En lo tocante a la versión del circo, según el relato que traslada en un comunicado la Asociación Circos Reunidos, una decena de manifestantes trató de acceder al interior del circo con carteles y gritando 'Este circo lo vamos a cerrar', "rompiendo toda la publicidad y tirando piedras a la taquilla del mismo".
Sostiene el colectivo que varios trabajadores del Circo Alaska fueron agredidos, amenazados e insultados, siendo los animalistas desalojados de las instalaciones por los guardias de seguridad hasta que llegaron varias dotaciones de Policía Nacional.
"Volvemos a ver un claro ejemplo de radicalismo y violencia animalista, imponiendo sus ideas a base de violencia", señala la asociación, que ha apuntado que las instalaciones del Circo Alaska han sufrido en estos días varias pintadas con amenazas.
Circos Reunidos añade que todos los animales del Circo Alaska "cumplen con la normativa de bienestar animal europea, el núcleo zoológico y el convenio Cites, siendo animales que han nacido en cautividad, son entrenados con premios y cariño, tienen grandes recintos para correr y jugar y cuentan con veterinario las veinticuatro horas del día, pero, lo más importante, son parte de la gran familia del circo".
Desde la asociación Circos Reunidos se condena la violencia y se está preparando una demanda contra estos activistas. El circo continuará instalado hasta este domingo, donde espera poder realizar sus funciones "sin ningún tipo de incidentes".
