Agentes de la Guardia Civil de Los Palacios y Villafranca (Sevilla) han detenido a tres jóvenes vecinos de la localidad que sustrajeron del interior de varios vehículos carteras y tarjetas de crédito con las que, posteriormente, realizaron extracciones de dinero, según ha informado el Instituto Armado en un comunicado de prensa.
Las investigaciones de la Guardia Civil se remontan al 22 de enero pasado, fecha desde la que se han recibido tres denuncias de vecinos por el robo de carteras con sus pertenencias que se encontraban en el interior de sus vehículos.
En uno de los casos, los delincuentes tuvieron que escalar una valla de tres metros para acceder al turismo de la víctima, un trabajador de vigilancia de seguridad, que estaba estacionado en el interior del polideportivo municipal.
En algunos casos, los ahora detenidos no pudieron hacer uso de las tarjetas de crédito para sacar efectivo de los cajeros al desconocer el número PIN de las mismas, pero en otro caso llegaron a extraer 600 euros, ya que el dueño de la cartera tenía las claves apuntadas en la misma.
En otro caso, además, lograron sacar un total de 750 euros, ya que averiguaron el número de seguridad, al ser fácil y coincidir con fechas de nacimiento.
Después de una laboriosa investigación y tras visionar las grabaciones de las cámaras de seguridad de las entidades bancarias, los agentes consiguieron averiguar la identidad de los presuntos autores, a pesar de que se tapaban la cara con capucha y gorras.
Seguidamente, los agentes localizaron y detuvieron a los sospechosos, en concreto F.J.J.M., de 20 años, por un robo con escalo y una estafa de tarjeta de crédito en grado de tentativa; M.C.R.S., de 29 años, por hurto en interior de vehículo y estafa de tarjeta de crédito, y J.A.M.E., de 26 años, por los delitos de estafa de tarjeta de crédito en grado de tentativa, dos robos con fuerza en las cosas (uno de ellos por el procedimiento del escalo) y un hurto en interior de vehículo.
La Guardia Civil insiste en recomendar que nunca se guarden las claves de las tarjetas bancarias en lugares facilmente accesibles, mientras que también se debe procurar que los números no coincidan con fechas que puedan averiguar fácilmente los delincuentes.