La Asociación Cultural Carnavalesca de Ronda celebra mañana las elecciones para renovar su junta directiva, de conformidad con los estatutos de esta asociación, tras la salida del hasta entonces presidente Antonio Narváez. Actualmente, quien le acompañara como vicepresidente, Miguel Berrocal, está ocupando el cargo de presidente en funciones.
Así, la asamblea general se celebrará a las ocho de la tarde en la sede de la calle Giner de los Ríos 22, durante la cual, tras la presentación de la memoria y el estado de las cuentas, se procederá a la presentación de candidaturas y posteriormente a la elección de la nueva junta directiva. Los interesados para presentar su candidatura podrán hacerlo este lunes desde las siete de la tarde hasta las nueve de la noche en la sede de la propia asociación.
Según los estatutos, solo podrán presentar candidaturas, compuestas por un mínimo de cuatro socios, para los cargos de presidente, vicepresidente, secretario y tesorero, todas aquellas personas que estén al corriente del pago de las cuotas y que tengan al menos dos años de antigüedad en la asociación, si es para el cargo de presidente, y uno si es para los demás cargos. Las personas que integren la nueva junta directiva de la Asociación Cultural Carnavalesca de Ronda serán elegidas por los dos años siguientes. Ésta deberá estar compuesta además por un mínimo de ocho miembros.
¿Quién puede votar?
Tendrán derecho a voto todos los socios que estén al corriente del pago de las cuotas. Además, la votación deberá ser presencial, por lo que la junta directiva actual anima a todos a asistir dada la importancia de esta asamblea, donde se elegirá a las personas que lleven las riendas de la asociación durante los dos próximos años. El presidente en funciones, quien tiene la intención de presentar su propia candidatura, desconoce si hay alguna otra. “Si te digo la verdad, aunque he escuchado que puede haber una otra”, cuenta Berrocal quien después de más de 30 años trabajando por el Carnaval de Ronda (fue uno de los fundadores de la asociación en 1989) considera que “la fiesta no puede quedarse en manos de cualquiera”.
La actividad del colectivo carnavalesco está en pausa hasta que se designe la nueva junta directiva.
