“Un año parece mucho tiempo, pero se va volando”. Lo dijo este sábado Mariano Rajoy, presidente del Gobierno y del PP. En realidad, era un mensaje dirigido de forma expresa a los 44 candidatos a alcalde que el partido presentará en las municipales de 2019 en la provincia; exactamente, dentro de un año, de ahí la alusión, tomada asimismo como excusa para exigirles a todos ellos mucho trabajo y mucha resaponsabilidad, “ya que vais a representar al PP en una convocatoria electoral, y el PP es el mejor partido de España, el que más se parece al conjunto de los españoles, por eso hemos ganado las últimas tres elecciones generales”. Rajoy no lo ocultó, aunque hubiera que leer entre líneas: “Hemos vivido cosas que no nos ha gustado vivirlas”, pero lo hizo para resaltar asimismo la “lealtad” de “la gente que saca a la calle su bandera del PP, porque la gente es lo más importante de este partido”, y para pedir a sus candidatos “trabajo, cercanía, humildad, saber escuchar, estar con la gente” y, por supuesto, que sepan “explicar” sus proyectos y la “capacidad de gestión” del propio partido.
A poco más de doce meses para la celebración de las elecciones municipales, el PP ya se ha colocado en la parrilla de salida; es más, ha emprendido la carrera. Lo hizo este sábado con el acto de presentación de sus candidatos en la provincia. Jerez fue la ciudad elegida -debates capitales al margen- y el punto de encuentro, el centro de negocios de San Agustín, restaurado por Zona Franca durante el último mandato del PP en la ciudad. Entre el público, la ministra de Empleo, Fátima Báñez, el comisario europeo Miguel Arias, las diputadas Teófila Martínez y María José García-Pelayo -ante sus respectivos sucesores en la batalla por las alcaldías de Cádiz y Jerez-, parlamentarias andaluzas, miembros de la ejecutiva provincial y militantes llegados desde diferentes ciudades para apoyar a sus candidatos.
A priori, un acto de los que gusta a la militancia, vivido en armonía, con aplausos espontáneos cada vez que salía el tema de la defensa de la unidad nacional, guiños, abrazos, pulgares en alto, música de fondo... pero en el que hubo una clara y remarcada línea argumental, una estrategia compartida de la que se quiso hacer partícipe a los candidatos y a todos los asistentes, casi una obligación: reivindicar la capacidad de gestión del PP como acceso directo a las alcaldías. Y no solo eso; también, contarle a la ciudadanía dónde residen esos méritos y trasladar mensajes en positivo. “Ahora está de moda destacar lo que no va bien”, dijo Rajoy, “y yo reivindico el orgullo de ser español y de vivir en una de las naciones más importantes del mundo, donde pasan muchas cosas buenas y otras mejores”. Y puso de ejemplo el turismo: “El año pasado nos visitaron 82 millones de personas, somos el segundo país del mundo con más visitantes, y que yo sepa sin que hayan sido obligados por nadie”.
En ese mismo mensaje incidió Antonio Sanz, presidente provincial del PP, que invitó a huir de la confrontación, “porque ésa es la foto del mal gobernante”, y a “hablar en positivo, porque somos el partido de las buenas noticias”, para lo que recurrió a varios hechos: la “recuperación de 51.000 empleos en la provincia”, la firma del acuerdo para los astilleros de la Bahía, la inversión en la regeneración de las playas, el impulso al corredor ferroviario, y la lucha contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar.
También se sumó al acto Juanma Moreno, presidente del PP-A, con la mente puesta en las elecciones que deben celebrarse unos meses antes de las municipales, las autonómicas, lo que le llevó a pedir un doble compromiso y un doble esfuerzo a la militancia, para con sus candidatos a alcaldes y para con el partido de cara a alcanzar la presidencia de la Junta de Andalucía.
Pero, sin duda, el gran protagonista del acto fue Antonio Saldaña, candidato por Jerez y anfitrión. No solo fue el más aplaudido durante la presentación de alcaldables -jugaba en casa, es cierto-, sino que supo ganarse al público con un discurso en el que apeló constantemente a las emociones y en el que jugó en todo momento con las metáforas y una estructura narrativa poco habitual en este tipo de atriles -hasta Sanz terminó por reconocer que no conocía que hubiese un “Saldaña poeta”-.
Saldaña, que llegaba a la cita aún magullado por la polémica suscitada días atrás a nivel provincial por el lema de su campaña local, “Jerez CaPPital”, habló de su libro, igual que los demás; en su caso, a través de un doble discurso, “el PP y nuestra gente” y “Jerez y nuestra gente”, pero lo hizo ajeno a los convencionalismos. En primer lugar equiparando al partido con una “roca”: “Nos hemos enfrentado a la crisis económica más dura de los últimos tiempos; algunos de los nuestros no han hecho las cosas como se debían hacer -también invitó a leer entre líneas-; y se quiere dar la sensación no real de que todo el mundo está contra el PP. Pero por mucha presión que se le haga no se le destruye, porque el PP es como una roca, y esa es la verdad”.
Y en segundo lugar, tomando como referencia prestada a Galileo y su libertaria frase: “... y sin embargo se mueve”, desde la que elogió la voluntad de todos los que han seguido reconociendo su vinculación con el partido pese a las adversidades que les ha supuesto enfrentarse al “pensamiento único” y tras las que, “como Galileo, han terminado por pronunciar sus mismas palabras: y sin embargo se mueve, para seguir defendiendo las ideas del PP”.
“Hay muchos Galileos en el PP”, reiteró Saldaña, para poner de manifesto que “el mayor valor del PP es su gente”. Pero, además de la gente del PP, también necesitaba hablar “de la gente de Jerez”, ya que, según dijo, “mi único objetivo es que los jerezanos vivan felices”. Fue ahí cuando la palabra “capital” se coló varias veces en el discurso, aunque de manera muy cuidada: “Jerez es capital mundial del motor, capital mundial del caballo, capital mundial del vino... pero también queremos que sea capital mundial del empleo, de la igualdad...”. Todo, “por un futuro de éxito para la ciudad y su gente”.
Saldaña provoca las lágrimas de pelayo
Antonio Saldaña tuvo una mención especial para su predecesora en la candidatura, María José García Pelayo, de la que destacó su entereza y su entrega por Jerez, pese a que tuvo que “enfrentarse a la maquinaria mediática de los más radicales, preguntándose a diario por qué tenía que pasar por eso”. La presidenta del PP de Jerez no pudo contener las lágrimas.
Apoyo expreso de Moreno a Romaní
El presidente del PP-A, Juanma Moreno, hizo público su “apoyo” al concejal del PP de Cádiz Ignacio Romaní, tras lo ocurrido hace unos días: “Ser del PP no es fácil y ni con amenazas ni insultos conseguirán que paremos. Siempre de frente”, animó Moreno, quien también se refirió al “próximo alcalde de la capital, Juanjo Ortiz, que falta hace para dejar atrás a Podemos y compañía”.
