El candidato conservador Marcelo Rebelo de Sousa se alzó con la victoria en las presidenciales lusas con más papeletas pero con menos porcentaje de voto que su predecesor, según el último escrutinio, que refleja una abstención del 51,16%.
Con el recuento prácticamente acabado, por encima del 99,5 % -sólo falta el voto emitido en trece consulados extranjeros-, Rebelo de Sousa obtiene el 52 % del apoyo del electorado, lo que equivale a 2,41 millones de sufragios.
El todavía jefe del Estado, Aníbal Cavaco Silva, logró en 2011 su reelección con el 52,94 % de los votos y 2,23 millones de papeletas.
Los datos de aquella cita electoral estuvieron marcados por la elevada abstención, que batió un nuevo récord y contribuyeron a que Cavaco Silva se convirtiese en el presidente menos votado de la democracia.
El escrutinio final de los comicios realizados ayer consolida al exrector de la Universidad de Lisboa António Sampaio da Nóvoa -próximo al Partido Socialista- en segundo lugar, con un porcentaje del 22,9 % y más de un millón de sufragios.
En 2011, el segundo clasificado fue el histórico socialista y poeta Manuel Alegre, con el 19,76 % del voto y 832.000 escrutinios.
La eurodiputada del Bloque de Izquierda, Marisa Matías, fue la principal sorpresa de la jornada y quedó tercera, con el 10,13 % de los votos y 469.000 sufragios.
En cuarta posición acabó Maria de Belém, la gran derrotada de le la noche electoral, que aspiraba a sacar en torno al 16 % de los apoyos y apenas superó ligeramente el 4 % con sus 196.000 papeletas.
Quinto fue el candidato apoyado por el Partido Comunista, Edgar Silva, con un porcentaje del 3,95 % y 183.000 votos.
Los restantes cinco aspirantes se presentaron sin ningún tipo de respaldo partidario, y entre todos apenas obtuvieron el 6,7 % de los escrutinios.
El que mejor resultado obtuvo entre este grupo fue Vitorino Silva, "calceteiro" de profesión (dedicado a colocar el empedrado de la tradicional 'calçada' portuguesa) y conocido por haber participado en diversos programas de "telerrealidad" que fue respaldado por 152.000 portugueses, lo que equivale al 3,28 % de los votantes.
