El etarra Ibón Goieaskoetxea, alias "Emil", comparece a partir de hoy ante el Tribunal de lo Criminal de París para responder por su actividad, desde un puesto de responsabilidad, en la logística militar de la banda, tras ser arrestado en febrero de 2010 en el noroeste de Francia.
El juicio, que se prolongará hasta la semana próxima, servirá para examinar los 31 cargos por los que ha sido encausado Goieaskoetxea, de 49 años y natural de la ciudad vizcaína de Gernika.
Entre los hechos más graves por los que ha sido acusado está un robo a mano armada contra una ferretería de Mirebeau, en el centro de Francia, cometido con particular violencia hacia el comerciante, el 28 de enero de 2010, justo un mes antes de su captura, para sustraer placas de matrículas en blanco y una troqueladora.
También se le acusa del alquiler de varias viviendas para alojar a otros miembros del aparato militar con los que -bajo su supervisión- ETA gestionaba sus zulos u organizaba formaciones en técnicas terroristas como la fabricación de artefactos explosivos o prácticas de tiro.
Todo eso en muy estrecha asociación con dos jefes militares de la organización que se destacaron por sus posiciones radicales y violentas en el interior de la banda durante la última fase de atentados: Garikoitz Aspiazu Rubina, "Txeroki", y su sucesor, Mikel Carrera Sarobe, "Ata".
Goieaskoetxea Arronategi fue detenido junto al histórico etarra José Lorenzo Ayestarán Legorburu y a Beinat Aguinagalde Ugartemendía el 28 de febrero de 2010 en una vivienda rural de Cahan, en Normandía, que él mismo había alquilado unos días antes.
Se les requisaron, además del coche robado que utilizaban -en el que tenían un artefacto para destruirlo-, dos pistolas, un revólver, una metralleta, munición, detonadores, componentes para explosivos, sistemas electrónicos de activación, abundante material informático, documentación falsa o más de 8.000 euros en efectivo.
Ayestarán y Aguinagalde fueron juzgados en diciembre de 2013 por los hechos que derivaban de esa operación y condenados a seis y cinco años respectivamente, penas que ya cumplieron y al término de las cuales fueron entregados a España, donde tenían abundantes cuentas pendientes con la justicia.
Durante la instrucción, los jueces franceses decidieron escindir el dossier de "Emil" de los otros dos porque él aparecía vinculado a hechos delictivos más graves y más numerosos en Francia en su larga trayectoria clandestina en ese país pero también por su posición jerárquica en el organigrama de la organización terrorista.
El ministro español de Interior cuando se produjo su captura, Alfredo Pérez Rubalcaba, había llegado a presentarlo como el "máximo responsable de ETA en (esos) momentos".
Goieaskoetxea ha recibido ya dos condenas en Francia, una en diciembre de 2014 a cinco años de cárcel tras recurrir el juicio que se le había hecho en rebeldía en noviembre de 2006, y otra a siete años en abril de 2013 en el proceso por el asesinato de dos guardias civiles en Capbreton (suroeste) en 2007.
