El Partido Republicano ha aplaudido la excarcelación de Alan Gross en Cuba pero ha criticado la decisión de las autoridades estadounidenses de dejar en libertad a tres espías cubanos, ya que sienta un "peligroso precedente" y "pone precio" a los ciudadanos norteamericanos.
El senador Marco Rubio ha reaccionado a las excarcelaciones en una entrevista con la cadena Fox News en la que ha lamentado el "peligroso precedente" que subyace tras el supuesto canje. A su juicio, este acuerdo "pone precio a los estadounidenses en el extranjero".
Sobre la posible restauración de las relaciones diplomáticas, Rubio ha subrayado que este acercamiento no tendría "nada que ver" con una mejora de los derechos y libertades de la isla. Rubio ha advertido de que facilitará un "alivio económico" al régimen castrista.
El senador también ha aprovechado para subrayar que el Congreso --a partir de enero dominado por completo por los republicanos-- no apoyará un hipotético fin del bloqueo.
CANJE ASIMÉTRICO
En la misma línea se ha pronunciado el senador Robert Menéndez, presidente de la Comisión de Exteriores de la Cámara Alta. Así, mientras que ha mostrado su "profundo alivio" por la liberación de Gross tras una detención "cruel" y "arbitraria", ha lamentado que Washington premie el "comportamiento brutal" de La Habana con la entrega de tres "espías condenados".
"No hay equivalencia", ha reprochado, en un comunicado en el que también ha advertido del "peligroso precedente" del que pueden beneficiarse en un futuro "regímenes dictatoriales".
"Temo que las acciones de hoy pongan en riesgo a miles de estadounidenses que trabajan en el extranjero para apoyar a la sociedad civil, defender el derecho a la información, proporcionar servicios humanitarios y promover reformas democráticos", ha apostillado.
