Izquierda Unida en la Diputación de Málaga exigirá, en el próximo pleno, al equipo de gobierno del PP que se garantice la libertad de los grupos políticos para presentar a las comisiones informativas y al pleno iniciativas con "total libertad" en cuanto a su elaboración, haciéndose efectivo "el derecho de participación política".
De igual modo, demandará, a través de una moción, que se garantice el libre acceso a las informaciones y expedientes que soliciten los grupos políticos, como garantía del principio de facilitar la transparencia y la tarea de fiscalización que compete a la oposición.
También que se asegure la respuesta "diligente, veraz y fundamentada" a las preguntas formuladas por los distintos grupos, según ha informado a Europa Press la portavoz de Izquierda Unida, Antonia Morillas.
En este mismo sentido, se reclamará al PP que se garantice con carácter inmediato, siendo efectiva, incluso, en el siguiente pleno, la participación de representantes de la ciudadanía en las sesiones plenarias.
Morillas ha señalado que, desde la entrada en vigor del Reglamento de Funcionamiento Interno de la Diputación de Málaga, documento que no logró el consenso de la Corporación, "la práctica política que impulsa el presidente, Elías Bendodo, sigue un derrotero de restricciones y obstaculización a la participación política y social creciente".
"El Pleno, el órgano de máxima representación política de la Diputación y llamado a actuar como foro de debate, toma de decisiones y caja de resonancia de las iniciativas y preocupaciones que más influyen y preocupan a la ciudadanía de la provincia, está siendo vaciado de contenido por la gestión que hace de él Bendodo, quedando reducido en la práctica a un órgano para despachar aquellas cuestiones de la gestión política que, en virtud de la legislación, son de obligada aprobación por el plenario", ha manifestado.
En este punto, ha acusado al equipo de gobierno de hacer "una instrumentalización del Pleno como si se tratara de un espacio para la confrontación político-institucional con la Junta de Andalucía y de censura del debate político plural".
A su juicio, "es flagrante el veto al derecho de participación de los distintos grupos políticos, eliminándose del orden del día aquellas propuestas que no son del agrado de la Presidencia". Así, ha indicado que una treintena de iniciativas presentadas por el grupo de IU han sido dejadas fuera del debate o, una vez incluidas, se ha negado su discusión.
Según Morillas, "la coartada tras la que el PP intenta pertrecharse para justificar tales atropellos es el artículo 101 del Reglamento de Funcionamiento de la Diputación, que alude a que las mociones que se debatan han de ser preferentemente de competencia provincial". Al respecto, ha opinado que "es un precepto que no cabe aplicar con carácter excluyente, ya que el adverbio, preferentemente, lo que condiciona es una preferencia, nunca una obligación".
"En cualquier caso --ha indicado--, absolutamente todas las iniciativas cuya inclusión o debate se ha rechazado tenían un claro interés para el conjunto de la ciudadanía malagueña y han sido redactadas, enfocadas y sus acuerdos planteados desde una perspectiva provincial".
CONTRA LA JUNTA
Además, ha criticado que "el Partido Popular haya centrado toda su actividad política en presentar mociones cuyos acuerdos correspondían a cuestiones en los que la competencia residía en el Gobierno andaluz". "Es el único grupo que no ha cumplido el condicionante de preferentemente, es más, lo ha invertido", ha denunciado.
Pese a esto, ha afirmado que, "aún a sabiendas de que la intención del PP con estas mociones es torpedear a la Junta, defendemos que han de incluirse, ya que abordan cuestiones que, aunque se expongan de forma partidista, afectan a los andaluces". "Sin pluralismo, ni hay democracia, ni hay juego político", ha advertido Morillas.
Para la portavoz de IU en la Diputación, "el Pleno tiene que ser un órgano que, junto a la toma de decisiones, conjugue otras funciones como el debate político-social o la defensa de los intereses generales de la provincia y que sea netamente permeable a la participación de la ciudadanía".
"El modelo de democracia representativa precisa de una transformación para que beneficie con sus acciones de gobierno a las mayorías sociales e incluya a la ciudadanía en la toma de decisiones acerca del modelo de desarrollo y de sociedad que se quiere", ha concluido la representante de la coalición de izquierdas en la entidad supramunicipal.