Un hombre de 43 años, con un amplio historial delictivo, ha sido detenido por la Policía Local en Málaga como presunto autor de un robo con fuerza en un domicilio gracias a la llamada telefónica de una joven, que -mientras fingía dormir en su habitación- alertó a los agentes de lo que estaba ocurriendo.
Los hechos ocurrieron el pasado jueves de madrugada en esta vivienda cuando estaba habitada por la joven, de 20 años, y su madre de 43, según ha informado la Policía Local en un comunicado.
La Policía se desplazó hasta el domicilio, comprobó que la puerta no había sido forzada y se dirigió al salón, estancia en la que se encontraba al individuo, que -aprovechando la oscuridad- golpeó súbitamente en la cabeza a un agente con un objeto contundente.
Este policía tuvo que recibir atención medica por esa agresión y se inició un forcejeo, del que el presunto ladrón logró zafarse momentáneamente e intentó huir por una ventana situada a ocho metros de altura, pero no lo consiguió porque uno de los agentes le sujetó de una pierna.
En esos instantes, llegó otra patrulla policial, a la que el supuesto autor de los hechos recibió de forma violenta e intentó propinar patadas y golpearle con una silla.
Finalmente, los agentes consiguieron reducir al individuo y comprobaron que la casa estaba revuelta, pero no pudieron detallar en ese momento si faltaba algún objeto de valor, pues las mujeres estaban muy nerviosas por lo ocurrido.
El supuesto ladrón entró en el domicilio de las víctimas, según las autoridades, por una ventana tras escalar unos ocho metros de altura.
El presunto autor de los hechos, que cuenta con más de una treintena de detenciones, la mayoría por robos con fuerza, fue puesto a disposición judicial y la investigación aún sigue abierta porque la Policía no descarta que tuviera un cómplice.