Solo unas horas después de su disputada victoria para hacerse con el liderazgo del PSOE en Jerez, la flamante secretaria general de los socialistas, Mamen Sánchez, prefiere quedarse con lo bueno de una tensa asamblea que tampoco le pilló demasiado por sorpresa “porque las asambleas de secretarias generales siempre han sido así”, pero de la que lamentó el “caos en la organización”, por el perjuicio para los militantes. “No creo que la militancia, que iba con interés por participar y hacer ejercer su derecho, al voto se mereciera ese trato organizativo”, asegura en declaraciones a este periódico.
A partir de ahora, Sánchez está dispuesta a poner “todo de mi parte” para ir todos “en una misma dirección” y recalca que es la secretaria general del partido “y de todos los militantes de Jerez”, independientemente de que una parte se decantara por el proyecto de Isabel Armario (144 votos) frente al suyo, que se impuso por 159. “Vamos a organizarnos para que la militancia vuelva a tener participación”, apunta, convencida de la “ventaja” que tiene de contar con una ejecutiva de 56 personas en la que “se ha unido distintas sensibilidades del partido, que llevaban años sin participar porque había poca estimulación para que esa participación se diera”.
Por esa razón, convertirse en secretaria general del PSOE, rompiendo con una bicefalia que tanto ella como sus simpatizantes veían contraproducente a nivel institucional y orgánico supone para la actual alcaldesa “un reto apasionante a año y medio de las elecciones”. En su ejecutiva quieren ir “cogiendo rodaje” porque “hay muchas cosas que hacer” y el objetivo es que en enero estén establecidos los proyectos y las distintas áreas y programas.
Además, está segura de que el nuevo horizonte de su partido beneficia también al funcionamiento del Gobierno municipal. “Queremos presentar una convención municipal y estar más presente en el día a día de la ciudad desde el Partido Socialista y esta Ejecutiva será la que incorpore a la militancia”, agrega. A su juicio, la nueva ejecutiva “es totalmente complementaria” para apoyar a la gestión municipal diaria, sobre todo teniendo en cuenta que es un gobierno “pequeño” (siete concejales) y la estructura del PSOE como partido “permite trabajar con muchos sectores de Jerez, por lo que tenemos ahora más manos para este Gobierno del PSOE”.
En cualquier caso, al margen de los propósitos de la nueva líder de los socialistas, el resultado de las votaciones ha vuelto a escenificar la división interna que acompaña a esta formación, con un reducido margen de diferencia de votos (15), que puede tener recorrido. ¿Se reeditará este pulso de cara a la carrera a la Alcaldía con otra candidatura alternativa a la suya?Sánchez prefiere “vivir el día a día” y dejar de hacer cábalas de cara a una hipotética tesitura para la que, de darse, “todavía falta año y medio”, pero sostiene que “no debería ocurrir”.
Tampoco cree que la fractura interna del partido tenga que ir a más. “Los votos son el resultado final de un día y un momento determinado, siempre habido poco margen entre los candidatos, creo que con Miriam (por Miriam Alconchel), fueron 21. Sí, la militancia habla, pero todo el mundo hoy (por ayer) es del PSOE, y todo el mundo tiene que estar en esto. Ese es el compromiso. Si yo perdía iba a estar a disposición y ayudando a la secretaria general. Nos dábamos esa posibilidad (por el congreso) pero al día siguiente borrón y cuenta nueva”, reitera, argumento que, en su opinión, desmontaría cualquier posibilidad de tener que volver a disputarse la candidatura a la Alcaldía.
El “mismo trato”
También ve prematuro hablar de la confección de las listas a más de año y medio para los próximos comicios municipales, teniendo en cuenta los antecedentes que tuvo en 2015, ni cree que el apoyo manifiesto que han brindado varios concejales de su Gobierno municipal a Armario tenga que mezclarse con la gestión municipal, al menos por su parte.
“En el día a día mi Gobierno no se ha resentido lo más mínimo, mis compañeros han sido tratados igual por mí”, aunque matiza que “si hubiera sido al contrario, yo no hubiera recibido el mismo trato”. “Se le puede preguntar a ellos, pero no he llevado a ninguna mesa del Gobierno municipal el tema del partido; quizás por mi experiencia política en el Congreso, sé diferenciar, y una cosa es el partido y otra el Gobierno”, concluye.
