La plantilla comenzó su itinerario en la rotonda del Milenio, teniendo como destino final la Subdelegación del Gobierno de la Junta. Allí el comité se reunió con el subdelegado, Tomás Herrera, de quien arrancaron el compromiso de “mediar en el conflicto. Se va a poner en contacto con la otra parte para buscar una solución al problema”.
El presidente del comité de empresa, José María Reula, incidió en que “el problema está totalmente bloqueado”. Aún así hoy mismo se podría mantener una reunión entre ambas partes. Reula también avanzó que “si aquí no hay solución al conflicto estamos dispuestos a ir más allá, a parar la obra de Cartagena. Los trabajadores así lo han decidido en asamblea”. Así pues la nueva medida prevé externalizar el conflicto fuera de la comarca.
Y es que, según el presidente, “este comité de empresa no va a negociar ni despidos ni traslados. No hay posibilidad de acuerdo por lo que ha puesto la empresa sobre la mesa ya que pedimos la retirada de los traslados”. Reula también indicó que ayer Imtech “amenazó a varios miembros del comité señalando que pueden acudir a un cierre patronal. Se trata de un órdago para tratar de meter miedo a la plantilla”.
Por su parte, el delegado provincial de Empleo, Juan Bouza, también se refirió ayer al conflicto de Imtech expresando su preocupación al respecto. En el esfuerzo de mediación acordado, Bouza mantendrá un encuentro con el director general de Imtech para tratar de desbloquear el conflicto. “Intentaremos, si es posible, evitar esos traslados. En el caso de que sean absolutamente necesarios, buscaremos que los trabajadores trasladados lo hagan en las mejores condiciones. Todo ello sin que, en ningún caso, suponga la antesala de futuras extinciones”.