El alcalde de Jaén, Javier Márquez, recibió ayer un escrito de Ciudadanos en el que le notifica la expulsión de los tres concejales elegidos por ese partido en las últimas Elecciones Municipales. Márquez, que había pedido a la dirección regional de la formación naranja que aclarase la situación legal de estos ediles, aseguró ayer que esta notificación no altera en modo alguno el estatus que el equipo de gobierno venía dando a los ahora ediles no adscritos.
El mismo escrito de Ciudadanos alude a la necesidad de aplicar el art. 73.3 de la Ley de Bases de Régimen Local donde se expone que “los derechos económicos y políticos de los miembros no adscritos no podrán ser superiores a los que les hubiesen correspondido de permanecer en el grupo de procedencia”, un precepto que, a juicio del alcalde tan solo viene a confirmar que estos ediles dejan de recibir la cantidad que le correspondía como grupos.
Márquez también admitió que la normativa y el pacto antitransfuguismo no autorizan a los ediles no adscritos a contar con despacho municipal, pero indicó que hay jurisprudencia que sí recoge el derecho de estos concejales a contar con un espacio para ejercer sus derechos como miembros de la Corporación.
Mientras tanto, los tres exconcejales de Ciudadanos aseguran no haber recibido comunicación alguna del partido notificándoles su expulsión, para lo que, en todo caso, podrían ejercer su derecho a alegaciones. Ayer mismo, los tres ediles presentaron en el Registro municipal un escrito asegurando que todavía pertenecen a Ciudadanos, aunque más tarde lo retiraron.
Y en este clima de confusión, la junta de portavoces volvió a reproducir ayer el enfrentamiento y la tensión entre los grupos por la situación de los tres exediles de Ciudadanos. El PSOE insiste en no reconocerlos en los órganos municipales.
