Los trabajadores de la Escuela de Hostelería de Islantilla han reclamado hoy que se paguen las nóminas que no han cobrado desde el pasado mes de mayo, así como que la Junta clarifique el destino de esta escuela y diseñe el plan formativo, inexistente durante todo el año 2015.
El portavoz de los trabajadores, Marcos López, ha dicho a Efe que los trabajadores no han recibido respuesta a las peticiones que han realizado para que se solvente la situación del centro, al que acuden a diario a trabajar a pesar de no tener asignada tarea alguna ni haber abierto el plazo de matrícula para este curso ni el próximo, que debería comenzar el próximo septiembre.
Así, ha concretado que han dado de plazo a la Junta de Andalucía "hasta mañana, para que dé muestras de resolver la situación", y que la Junta aclare "si otra vez tiene intención de pasarnos a la Consejería de Empleo, ante la falta de respuesta en estos años dentro de la Consejería de Educación".
"No hemos podido iniciar ninguno de los cursos de Cocina y Restaurante para este año 2015, y a estas fechas tampoco tenemos permiso para abrir la convocatoria de solicitudes de nuevos alumnos, aunque se nos dice que los cursos empezarán en septiembre", ha señalado.
Ha lamentado, tras cobrar en enero pasado once nóminas pendientes, que "de nuevo se ha entrado en una situación de impagos a los trabajadores por parte de la Junta, aunque hemos estado asistiendo a nuestros puestos de trabajo diariamente".
De momento, la escuela no ha funcionado este curso que debería haberse clausurado a finales de junio, de modo que no se han podido realizar las acciones formativas este año, "y la teórica subrogación a la agencia de la Junta para garantizar la financiación y fiscalización de estos centros sigue pendiente y bloqueada".
Sin otras noticias, el consejero de Empleo, José Sánchez Maldonado, ha afirmado hoy que en esta legislatura abordará el cambio de modelo de los Consorcios Escuelas de Formación para el Empleo, al que pertenece Islantilla, con su incorporación a la Junta de Andalucía, mediante la integración del personal y la experiencia formativa de excelencia que imparten, en un ente instrumental de gestión propio.