En concreto, este galeno ha explicado en declaraciones a Europa Press que el último de estos episodios violentos tuvo lugar el pasado sábado sobre las 12,30 horas, "cuando un usuario comenzó a insultarme y amenazarme de muerte simplemente porque no estaba de acuerdo con el tratamiento que le estaba prescribiendo para su dolencia".
A raíz de este desacuerdo, ha proseguido el propio galeno, "desde el centro tuvimos que llamar a la policía, ya que este paciente permanecía esperando en la puerta del centro a la espera de que yo saliese, tal y como me había amenazado previamente en la consulta".
Como consecuencia de estos hechos, el citado médico tuvo que abandonar la guardia, --la cual fue suplida por un compañero de relevo--, con un estado "de estrés y ansiedad", según relata el propio afectado, que también ha interpuesto la pertinente denuncia ante la Jefatura de Policía Nacional y que se encuentra pendiente de obtener la baja por estrés laboral. Sobre este último extremo, ha puntualizado que pedirá la baja "por accidente laboral".
Por su parte, el presidente de la sección de Sanidad en CSIF-Sevilla, Fernando Castelló, ha anunciado a Europa Press que los servicios jurídicos del sindicato llevarán el caso de este galeno para que se considere delito de atentado contra un funcionario público en el ejercicio de sus funciones, si bien también ha solicitado que al SAS que se persone en este caso como acusación popular contra el usuario.
Castelló, que ha valorado la sensibilidad que desde el Distrito Sanitario Sevilla están mostrando ante este tipo de casos, ha confiado en que "estén trabajando en la promesa que las autoridades sanitarias nos hicieron de que pondrían un vigilante de seguridad las 24 horas del día en el centro de salud de Amate", y del que "aún carece a partir de las 2,00 horas de la madrugada", ha concluido.
