El escolta estadounidense KC Rivers rescató, con cuatro triples en los minutos finales, a un Real Madrid gris y fallón que sumó su tercera victoria en la Liga ante un Joventut que vendió cara su derrota y tuvo opciones de ganar hasta el último segundo.
El escolta estadounidense, con quince puntos y su acierto desde la línea de 6,75 cuando peor lo pasaba su equipo, dio la vuelta a un choque que tenían perdido los locales y que decidió, con una canasta a tres segundos de final, Felipe Reyes en su partido 600 en la Liga.
El primer cuarto arrancó con el protagonismo de los hombres altos. Kirksay anotó siete de los nueve primeros puntos de los catalanes y Ayón las dos primeras canastas madridistas. El mexicano se vio acompañado por un Reyes que peleó bajo los aros y aportó puntos y solidez en la zona.
Tras unos minutos iniciales igualados, un Madrid más efectivo que en los últimos partidos fue abriendo brecha paulatinamente en el marcador ante un Joventut que acumuló imprecisiones en este cuarto (33-22).
Sin embargo, un parcial de 10-3 en el arranque del segundo acto para los verdinegros, que se aprovecharon de varias pérdidas de su rival, obligó a Pablo Laso a pedir un tiempo muerto en el minuto 14, cuando la renta se redujo a cuatro puntos.
Con el marcador más ajustado, los locales jugaron menos cómodos y acumularon más perdidas y fallos, con momentos en los que faltó claridad de ideas. Su rival se aprovechó de ello y, con sendos triples de Mallet y un entonado Kirksay, se puso por delante en el minuto 17 (40-41).
Sergio Llull anotó desde la línea de 6,75 sobre la bocina (50-51) para apretar el marcador al final de un cuarto que los verdinegros dominaron por 29-17.
Tras la reanudación, Laso volvió a situar en la pista a Reyes y Ayón. También sacó al base balear buscando imprimir una velocidad de la que carecía el Real Madrid hasta entonces, aunque su equipo seguía sin carburar.
El propio Llull, con un triple en el minuto 26, volvió a situar a los suyos por delante (61-59). De ahí al final del cuarto, la misma tónica en los dos equipos y todo por decidir en los últimos diez minutos (64-66).
Un parcial de 3-10 en cuatro minutos encendió las alarmas en el Madrid, que no encontraba el aro, y dio la máxima diferencia de nueve puntos al conjunto catalán (67-76) con un triple de Mallet. Entonces apareció Rivers, con cuatro triples casi consecutivos, para mantener con vida a su equipo (81-82, minuto 37).
De ahí hasta el final, mucha igualdad hasta que Felipe Reyes celebro sus 600 partidos en la Liga con una canasta bajo el aro a tres segundos del final. El Joventut falló dos tiros y se llevó la primera derrota de la temporada.
