La noche del 1 de marzo, la Plaza de España de Conil se convirtió en el escenario de uno de los momentos más esperados del Carnaval: el pregón de Juan Diego Ramos Camelo 'Marsalao'. Con una Plaza abarrotada de conileños y visitantes, el pregonero demostró por qué es uno de los grandes referentes del carnaval de Conil, llenando la noche de emoción, risas y coplas inolvidables.
Desde el primer momento, Juan Diego supo conectar con el público, entregándose por completo y dejando claro que su amor por el Carnaval es infinito. Con ilusión, sentimiento y un gran sentido del humor, regaló a su pueblo un pregón cargado de recuerdos, homenajes y guiños a la historia de esta fiesta que tanto significa para Conil. Sus palabras, llenas de pasión y autenticidad, hicieron vibrar a todos los presentes, que no dudaron en mostrarle su cariño y admiración.
La alcaldesa de Conil, Inmaculada Sánchez, felicitó al pregonero destacando su gran vinculación y conocimiento del Carnaval, asegurando que su intervención había superado todas las expectativas. Por su parte, la delegada de Fiestas, Catalina Almazo, reafirmó su apuesta por la juventud y el talento local, señalando que Juan Diego representa a una generación que está contribuyendo de manera decisiva al crecimiento del carnaval conileño.
Con una trayectoria destacada en diferentes agrupaciones, 'Marsalao' hizo un recorrido por su historia carnavalesca, recordando con orgullo su paso por formaciones como "La chirigota del Sofri", "La comparsa del Cojo" y "La chirigota de Rufino". Además, no dejó pasar la oportunidad de homenajear a grandes nombres del Carnaval local, como Antonio Cereto y Flores, quienes han sido inspiración para él y muchos otros.
El público disfrutó de un pregón lleno de sentimiento, con momentos de carcajadas y otros de profunda emoción. Sin duda, Juan Diego Ramos Camelo logró lo que todo pregonero sueña: dejar huella en el corazón de su pueblo y marcar el inicio de un Carnaval inolvidable.
Y es que no queda más que agradecerle su entrega, por emocionarnos, por hacernos reír y por recordarnos una vez más la grandeza de nuestra fiesta. ¡Enhorabuena, Juan Diego, y que siga la magia del Carnaval de Conil!