La Hermandad del Santo Entierro hizo su anual Vía Crucis presidido por el portentoso Cristo Yacente, obra de Juan de Mesa.
Como cada segundo domingo de Cuaresma, la imagen visitó la Capilla del Museo y la Iglesia de San Antonio Abad, haciendo un breve recorrido por la Plaza del Museo y la calle Monsalves.
La música de capilla y el rezo de las estaciones se hacían presentes en el respetuoso silencio que los devotos asistentes guardaban al pasar las andas, que iban iluminadas por cuatro faroles de mano.