El arzobispo castrense de España y miembro del Comité Ejecutivo de la Conferencia Episcopal Española deja tras de sí nueve años de fecundo episcopado. En este periodo de tiempo ha creado el Instituto Superior de Ciencias Religiosas Asidonense y el Instituto Teológico San Juan de Ávila devolviendo así la sede del Seminario Diocesano a la ciudad de Jerez.
Además, logró mantener la vida contemplativa en el Monasterio de la Cartuja con la presencia de las Hermanas de Belén y dotó a la Diócesis de nueva sede en el palacio de Bertemati, edificio histórico jerezano cuya recuperación ha permitido beneficios como la expansión de Cáritas Diocesana o la reunión de los archivos y bibliotecas asidonenses.
A lo largo de estos nueve años, el administrador apostólico de Asidonia-Jerez puso en marcha nuevas parroquias en Jerez, El Puerto de Santa María o Sanlúcar de Barrameda. También promovió la Normativa Diocesana de Hermandades y Cofradías, la Pastoral de Exequias y delegaciones diocesanas como las de Pastoral Universitaria y de la Cultura o la de Medios de Comunicación Social.
El pasado 27 de septiembre, Juan del Río Martín tomó posesión de su nuevo destino pastoral como arzobispo castrense, nombramiento que lo ha mantenido durante meses como administrador apostólico de Asidonia-Jerez hasta que el pasado 19 de marzo fuera nombrado su sucesor, monseñor José Mazuelos Pérez, quien tomará posesión previa ordenación episcopal en la misma celebración de la eucaristía, que tendrá lugar el próximo 6 de junio en la Santa Iglesia Catedral.
En estos días se convierte en oportuno recordatorio del sentido de esta cita el escrito con el que el vicario de Pastoral, José Palomas Agout, se dirigía recientemente a sacerdotes, religiosos, religiosas y laicos recordando que la eucaristía de hoy es “una ocasión que Dios nos brinda para agradecer a don Juan su presencia entre nosotros, sus trabajos y desvelos, y el interés por mejorar en todos los aspectos esta diócesis de la que ha sido su pastor”.
En un par de semanas, Asidonia-Jerez asistirá a la toma de posesión del que será su tercer obispo, José Mazuelos, que sucederá a Juan del Río y Rafael Bellido Caro, respectivamente.
