La nueva delegada de la Junta de Andalucía en Almería, Gracia Fernández, ha abogado este miércoles por fomentar la "colaboración interinstitucional" a fin de que la provincia "deje de ser la gran olvidada", de manera que ha apuntado que sin el resto de administraciones Almería no podrá "avanzar todo lo que necesita".
La delegada ha destacado como objetivo "mejorar la calidad de vida de Almería" así como seguir con "todo lo que la anterior delegada ha estado defendiendo y conseguir que mejore todo lo que todavía se necesita".
Fernández, cuyo nombramiento fue aprobado este martes por el Consejo de Gobierno, ha mantenido una reunión con su antecesora en el cargo, Sonia Ferrer, y ha agradecido a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, la "confianza" que deposita en ella para desempeñar este puesto, lo que ha calificado como "reto importantísimo".
"Voy a poner todo el empeño y esfuerzo para desempeñarlo lo mejor posible, con honestidad y humildad e intentando que todas las políticas que Susana Díaz va a defender desde la Junta de Andalucía, lleguen a cada rincón de la provincia de Almería, como es la línea estratégica de proteger a las personas que más lo necesitan, las más vulnerables", ha manifestado.
Por su parte, Ferrer ha hecho un pequeño balance sobre su etapa al frente de la representación del Gobierno andaluz, de forma que ha lamentado dejar "algunas cuestiones pendientes" en materia de infraestructuras y ha señalado la colaboración con entidades sin ánimo de lucro como una de sus mejores experiencias.
Gracia Fernández es licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Granada. Desde agosto de 2015 era delegada territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta en Almería.
Fernández ha ocupado distintos puestos de responsabilidad en el sistema sanitario público andaluz. Así, fue directora gerente del Área Sanitaria Norte de Almería (2008-2015) y directora de la Zona Básica de Salud del Bajo Andarax y de los distritos Levante-Alto Almanzora (1998-2000) y Poniente de Almería.
