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Almería

PSOE e IU aluden a convenios urbanísticos y el agua para no apoyar la segunda aprobación provisional del PGOU

Desde el PSOE también han apuntado a la \"duda respetable\" que, a su juicio, plantea el informe hidrológico sobre la dualidad del agua mediante su extracción de los Pozos de Bernal y la obtención de agua desalada; un asunto que espera que pueda arreglarse durante el periodo de alegaciones

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El Ayuntamiento de Almería ha aprobado este lunes en sesión plenaria extraordinaria y con los votos favorables del equipo de gobierno (PP) la segunda aprobación provisional del plan general de ordenación urbana (PGOU) de la capital almeriense después de que el PSOE se abstuviera en la votación e IULV-CA se mostrara en contra debido, principalmente, a los convenios urbanísticos que recoge el planeamiento y que, entre otras cosas, conllevarían cambios sustanciales en la zona ocupada actualmente por el colegio La Salle y la Compañía de María.

   Tanto para IU como para el PSOE estos convenios urbanísticos responden a "intereses privados" que conllevarían la construcción de un centro comercial y unas 200 viviendas bajo la supresión de un colegio, en el caso de La Salle, y la construcción de un hotel con encanto y "cientos de apartamentos turísticos" en la Compañía de María, según ha especificado el portavoz del PSOE, Joaquín Jiménez.

   Ante esto, el portavoz del equipo de gobierno y concejal de Urbanismo, Pablo Venzal, ha recalcado que la mayoría de estos convenios urbanísticos son los que permitirán conseguir "suelos productivos" para la ciudad a la vez que ha recordado la necesidad por parte del Ayuntamiento de "cumplir los pactos" en las zonas de equipamiento privado para evitar reclamaciones.

   En este sentido, ha recordado que todos los acuerdos urbanísticos cuentan con un dictamen favorable salvo estos dos acuerdos que, pese a todo, son sabidos por la ciudadanía. "El que no sepa del convenio entre El Corte Inglés y La Salle es que no es almeriense", ha manifestado el edil popular, quien ha respondido además a las críticas de IU sobre la falta de conocimiento del PGOU. "¿Qué más hace falta? ¿Una batucada paseo abajo?", ha añadido Venzal, quien ha defendido los procesos de participación.

   Así, ha insistido en que este PGOU es "bueno para Almería" en cuanto a la dotación de zonas verdes, industriales, edificabilidad y suelo terciario que planea y que proviene del "consenso" y la "coordinación" que se ha tenido con la Junta de Andalucía, que contará de plazo hasta marzo para revisar el planeamiento dentro de sus competencias sobre ordenación del territorio.

   Desde el PSOE también han apuntado a la "duda respetable" que, a su juicio, plantea el informe hidrológico sobre la dualidad del agua mediante su extracción de los Pozos de Bernal y la obtención de agua desalada; un asunto que espera que pueda arreglarse durante el periodo de alegaciones.

   Venzal se ha mostrado de acuerdo en que Almería "no puede renunciar a la propiedad de su agua no desalada" ni a los pozos, de los que "tiene las escrituras", por lo que ha rechazado la concesión de los pozos y espera que se dé un "consenso razonable" en la negociación que tendrá que darse entre la Junta y el Ayuntamiento en cuanto a la gestión del agua para la capital a la que "Sevilla tendrá que darnos una salida".

   "Espero que la Junta sea sensible a este asunto", ha indicado el concejal de Urbanismo, para quien sería "muy duro" dejar en manos de una concesionaria la potestad sobre los recursos hídricos siendo además "el único municipio donde se aumentar el consumo de agua desalada".

"DEMORA" EN LA CREACIÓN DEL DOCUMENTO

   Los grupos de la oposición han criticado la "demora" con la que llega este plan, que supone la "pérdida de equipamiento público", según el portavoz de IU, Rafael Esteban, quien al igual que Jiménez, ha señalado las "dudas" que le supone este documento ante el "cambio de criterio" que supone con respecto a la anterior corporación --cogobernada con el extinto GIAL-- y la "falta de participación" de la ciudadanía en su elaboración.

   Venzal ha esgrimido un informe de la Cámara de Cuentas de Andalucía que eleva a 12 años y tres meses el tiempo medio en el que una ciudad andaluza de más de 50.000 habitantes tarda en redactar su planeamiento a consecuencia de los planes regionales y subregionales de la Junta de Andalucía a los que se tiene que adaptar el documento. "Nosotros estamos a nueve años, con lo que batiríamos un récord todavía", ha apostillado.

   Igualmente, ha señalado la tardanza de algunas administraciones regionales y estatales en emitir sus informes, la mayoría de ellos vinculantes, y "algunos enormes y prolijos". "Hoy en día, la responsabilidad de los planes generales no depende solo de los ayuntamientos", ha recordado el portavoz popular, quien además ha recordado que se han contestado unas 6.000 alegaciones.

   El plan, según ha relatado Venzal, va a "mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, va a aumentar los espacios libres, con un incremento sustancialmente de las zonas verdes y de equipamiento" de manear que se aumentará en un 56 por ciento las zonas de equipamiento, que pasará de 14,51 por ciento en cuanto al metro cuadrado por habitante a 29,2 por ciento sobre una población de 250.000 personas.

   Igualmente, Venzal considera que la ciudad será "más competitiva" a la hora de "atraer inversión, riqueza y empleo" con una nueva dotación de suelo industrial y terciario, que hasta ahora permanece "agotado". Este aspecto se ha mostrado clave para el concejal, que prevé la creación de espacios atractivos para atraer inversiones, especialmente junto al Parque Tecnológico de Almería (PITA).

   El documento final contempla también cambios sustanciales en el parque periurbano de La Molineta, donde se ha reducido la presión constructiva y se promueve la protección de elemento entográficos; una cuestión por la que el pleno se ha mostrado conforme y que el portavoz de IU ha achacado a la acción ciudadana que defendía la protección del parque.

   Con todo, el concejal de Urbanismo se ha dirigido a la bancada de la oposición, a la que ha pedido que haga "todo lo que pueda para que este documento esté aprobado en seis meses" por parte del Gobierno andaluz.

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