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Almería

Níjar tramita el proyecto de hotel de ocho habitaciones y piscina en Cabo de Gata

Tramita el proyecto de actuación para la puesta en marcha de un establecimiento hotelero en el camino de El Playazo, en el núcleo del parque natural

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  • Playazo de Rodalquilar. -

El Ayuntamiento de Níjar (Almería) tramita el proyecto de actuación para la puesta en marcha de un establecimiento hotelero en el camino de El Playazo, en el núcleo del parque natural de Cabo de Gata de Rodalquilar, con ocho habitaciones y piscina, que se levantará de forma parcial sobre unas construcciones "preexistentes".

El hotel, con una superficie construida de 315,45 metros cuadrados de los 163,10 corresponden a esas edificaciones "preexistentes", constará de "tres edificios" e integrará "la actual casa de planta baja y los dos corrales para albergar", además de las ocho habitaciones, un salón social, terraza, aseos comunes, cuarto de instalaciones y almacén, según consta en la documentación consultada por Europa Press.

La actuación, "con la que se pretende responder a la creciente demanda de servicio de este tipo de instalaciones, tanto durante el periodo estival como durante el invierno aprovechando el clima cálido como el de Almería", se proyecta sobre "suelo no urbanizable de especial protección", y en la normativa ambiental que rige en el parque natural el terreno está calificado como "zona C1 de cultivos agrícolas".

El proyecto de actuación, cuya admisión a trámite se aprobó el pasado 30 de diciembre en pleno extraordinario del ayuntamiento, gobernado por el PSOE, tras varias modificaciones a instancia de la autoridad ambiental y está en periodo de información pública desde el martes, indica que se trata de un hotel rural que se ubicará junto al camino de El Playazo.

Detalla que el proceso de construcción consistirá en la "reforma y acondicionamiento de la casa y corrales existentes, así como en acondicionar el terreno para la instalación de los distintos elementos que darán servicio, las vías internas de circulación, la reforma de la balsa existente y piscina".

Añade, que tras esto, se procederá a la construcción de las edificaciones que albergarán las actividades y precisa que la "ampliación" con respecto a la superficie ya edificada es de 152,35 metros cuadrados. El plazo de ejecución previsto es de 18 meses a partir de la autorización del proyecto y el presupuesto que recoge la documentación asciende a 331.699,56 euros.

Los promotores del hotel rural defienden su utilidad pública y su interés social ya que, según sostienen, una de las "principales fuentes de ingresos" de Cabo de Gata y su entorno es el turismo y remarcan que el "principal atractivo" del establecimiento hostelero que proponen es "es enclave único junto al Playazo, donde se podrá disfrutar de la desconexión de aglomeraciones urbanas".

"Entendemos que este complejo será de gran interés a turistas que quieran disfrutar de un clima y un paisaje único como el de Rodalquilar", trasladan en el proyecto de actuación, que destaca "la proximidad de la playa" en un entorno que definen "como seminatural", y justifica la actuación en esta zona de "especial protección" en que "no hay suelo urbano que cumpla con las características anteriores".

Señalan los promotores, asimismo, que el lugar previsto para el establecimiento es una finca "rústica que ya contiene edificaciones de uso residencial" y "edificaciones relacionadas con la explotación agrícola", lo que "justifica su idoneidad" para ubicar "un establecimiento turístico en medio rural".

REPAROS AMBIENTALES DE LA JUNTA ANDALUZA

El proyecto de actuación se presentó para obtener Autorización Ambiental Unificada en 2018, pero la Delegación Territorial de Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía le hizo un primer requerimiento para que lo replantease "estableciendo el uso hotelero y no como casa rural" ya que no se correspondía con lo recogido en la normativa de gestión del espacio protegido.

En febrero de 2019, la Junta detectó aspectos que lo hacían "inviable" y pidió a los promotores que subsanasen la documentación aportada e hiciesen "aclaraciones". En concreto, se solicitó que acreditase documentalmente la existencia de las "edificaciones a rehabilitar antes" de que fuese declarado el parque natural y que precisase si los dos corrales a rehabilitar "tienen cierta entidad constructiva y complejidad técnica, y si tienen o pueden albergar un uso residencia en atención a sus dimensiones y características actuales".

Asimismo, instó a subsanar el hecho de que el proyecto plantease una ampliación "desligada de la edificación principal y dispersando la superficie construida" y a que se concretasen cómo se iban a diseñar los espacios libres, la piscina, los vallados, las terrazas, el aparcamiento y los viales.

En julio de 2019, y de acuerdo al informe de la Dirección del parque natural de Cabo de Gata-Níjar, la Junta volvió a requerir a los promotores para que se subsanasen "un error de superficies" y para que los promotores aclarasen el "descuadre" de cifras en el proyecto ya que, según la citada normativa, la ampliación máxima es de 152,35 metros cuadrados "pero el cuadro de superficies y los planos aportados reflejan una superficie de 172,90 metros cuadrados de ampliación".

Interesó, asimismo, que se informase por parte de los promotores sobre las "características de las diferentes construcciones e instalaciones previstas, incluyendo el espacio de la piscina y las zonas de terraza" para poder hacer una "valoración ambiental adecuada" de los "posibles impactos ambientales directos e indirectos sobre los valores naturales y el paisaje".

Otro de los requerimientos se hizo en el sentido de que modificase el material utilizado para el asfaltar el aparcamiento, cuya superficie calificaba de muy elevada con respecto a la superficie total, para evitar "la afección directa al recurso edáfico" que conllevaría un "menoscabo de los valores a mantener en el contexto agrario y natural en el que se enmarca" el hotel.

Como consecuencia, la actuación ha tenido que cambiar, a petición la administración andaluza, el uso previsto para uno de los dos corrales localizados en la finca y ya no plantea uso cubierto, "solo los muros perimetrales", al tiempo que mantiene uso agrícola.

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