La Policía Real de Gibraltar ha detenido a tres hombres acusados de violar el confinamiento domiciliario establecido como medida preventiva ante el coronavirus. Uno de ellos, además, violaba la orden de alejamiento que le había sido impuesta tras ser acusado por violencia de género.
Este último caso, según informa en una nota la Royal Police gibraltareña, comenzó el martes por la noche, cuando los agentes acudieron por el aviso de un caso de violencia doméstica a Ramillies House, en Varyl Begg Estate. En la vivienda en cuestión, los policías hallaron a una mujer con heridas faciales que afirmaba haber sido agredida por R.L., individuo de 32 años residente en Royal Sovereign House.
El individuo fue detenido después de mantener un forcejeo con los agentes, ante quienes mostró un comportamiento agresivo que llevó a los policías a usar un espray para lograr inmovilizarlo y colocarle las esposas.
Una vez ante el juez, éste decretó libertad con cargos, además de una serie de medidas de protección de la víctima, como una orden de alejamiento. Sin embargo, cuando agentes de la Policía Real patrullaban anoche por Varyl Begg Estate localizaron a R.L. en la calle, por lo que fue detenido por infringir el confinamiento sin un motivo para ello, así como la orden de alejamiento que se le había impuesto.
Por otra parte, durante otra patrulla en Glacis Estate, los agentes localizaron en la zona de Laguna House a N.M.E.H., de 23 años, quien tampoco pudo argumentar una razón válida para abandonar su residencia. Una vez identificado le fue imputado también un delito de robo cometido en un restaurante de Ocean Village el 24 de febrero en el que robaron dinero en efectivo y otros bienes.
Por último, también anoche, agentes de la Royal Police acudieron ante el aviso de un altercado doméstico en Mid Harbors Estate. En esa zona detuvieron a I.M., de 42 años y residente en Victoria House, en Alameda Estate, por estar fuera de su residencia y en un lugar público sin razón para ello.
