El Gobierno de Reino Unido abonará directamente el 80% del salario de los trabajadores afectados por el coronavirus durante tanto tiempo como sea necesario para evitar su despido, según ha informado este viernes.
Así lo ha anunciado el ministro de Finanzas y responsable de Hacienda de Reino Unido, Rishi Sunak, durante la rueda de prensa diaria que lleva a cabo junto al primer ministro, Boris Johnson, debido al brote de coronavirus.
Sunak ha explicado que las arcas públicas se harán cargo del 80% del salario, por un máximo de 2.500 libras (2.731 euros) al mes, de todos los trabajadores que sigan en nómina pero no estén trabajando porque el negocio haya tenido que bajar la persiana por el coronavirus.
La medida ha sido anunciada después de que Johnson comunicara que, desde esta noche, quedarán cerrados la mayoría de comercios abiertos al público en todo el país, de forma similar a lo que ha pasado en Italia o España. Así, desde medianoche no podrán abrir bares, restaurantes, salas de cine, gimnasios, casinos o museos.
"Sabemos que estas medidas tendrán un impacto económico significativo y tengo la responsabilidad de asegurarme que protegemos todo lo posible los empleos y los ingresos de las personas", ha explicado Sunak.
Así, el ministro ha explicado que "cualquier empleador del país", ya sea "grande o pequeño", "con o sin ánimo de lucro", podrá acogerse al Esquema de Retención de Empleos por el Coronavirus, a través del cual se articularán los pagos del 80% del salario.
El Esquema estará operativo al menos durante tres meses, aunque Sunak ha subrayado que lo extenderá "durante tanto tiempo como sea necesario". Asimismo, ha indicado que no hay límites de fondos para "apoyar tantos empleos como sea necesario".
Asimismo, para incrementar el flujo de caja y el efectivo de las empresas en estos momentos, el Ejecutivo británico ha decidido atrasar el pago trimestral del IVA y las empresas tendrán de plazo para abonarlo hasta finales de año.
"Medidas sin precedentes para tiempos sin precedentes", ha concluido el ministro de Finanzas británico, que en los últimos días ha anunciado otras medidas económicas como una línea de préstamos respaldados por el Gobierno de hasta 330.000 millones de libras (360.537 millones de euros).