Cáritas Diocesana abrirá a mediados de noviembre la ‘Casa de Acogida Nuestra Buena Madre’, coincidiendo con la campaña de recogida de la aceituna, un nuevo recursos para personas sin hogar, con cincuenta camas y destinado únicamente a las pernoctaciones.
Así lo ha confirmado este jueves el director de Cáritas, Rafael López-Sidro, durante la celebración de un acto reivindicativo enmarcado en la campaña de las personas sin hogar, que este año se ha desarrollado bajo el lema 'Ponle cara'.
Las instalaciones se abrirán en locales del centro educativo ‘Hermanos Maristas’ y están ubicadas en la Avenida de Madrid, en el acceso por el polideportivo del centro de enseñanza, un edificio de viviendas con tres plantas de las que dos serán para este nuevo recurso asistencial de Cáritas Diocesana. “Se les ofrecerá la acogida a las personas sin hogar tantas veces como la necesiten”, dice. Ya se han hecho unas reformas y en breve se amueblará.
Las pernoctaciones serán desde las 20 horas a las 8 horas. El resto de servicios se ofrecerán en el centro de día. “Todas sus necesidades quedarán cubiertas con el nuevo servicio que vamos a prestar”, confirmó.
En Jaén capital hay entre 40 y 50 personas durmiendo todos los días del año en la calle, una “cifra preocupante teniendo en cuenta las dimensiones de la ciudad”, valoró. “El simple hecho de que haya una sola persona viviendo en la calle es un dolor enorme y exige medidas serias. El problema es que la Administración pública no tiene recursos para este tipo de personas y en Andalucía no hay ni un sólo centro público para acoger a personas sin hogar y los poco que hay, la mayoría son de Cáritas”, aclaró.
Este nuevo recurso se suma al Hogar Santa Clara, el Centro de Día Santa Clara y el dispositivo de calle. “Estas instalaciones suponen un complemento definitivo con el que cerramos el círculo y tendremos, posiblemente, el programa más completo de España de atención a personas sin hogar”, confirmó.
López-Sidro aseguró que están “desbordados” porque “el número de personas sin hogar ha aumentado lamentablemente y se ha agravado el estado físico y psíquico de estas personas”.
En el acto se leyeron frases de personas sin hogar, en las que se reflejaban sus sentimientos y dificultades, se guardó un minuto de silencio para reflexionar sobre el ‘sinhogarismo’ y se leyó un manifiesto.
