La hija de un paciente de Traumatología en el Hospital de Jerez, que estaba a la espera de que el equipo médico tomara la decisión de darle el alta o de intervenirle, después de que tras una operación de cadera se le saliera la prótesis, se encontró este martes con una multa de 200 euros por parte de la Policía local y la retirada de la tarjeta de minusválido de su propio padre cuando aguardaba para recogerlo a la puerta del propio Hospital.
Los médicos, el día antes de los hechos ocurridos, informaron a la familia que “puede que lo mandemos para casa para ver si no hace falta operar de nuevo y la prótesis vuelve a su sitio”.
Ante esta situación, la hija del paciente cogió su coche y la tarjeta de minusválido, que está a nombre de su padre, y cuando fue a aparcar delante de la puerta del hospital, “un señor sin uniformar me da un grito, se me coloca delante y me dice: alto, policía”, relata la afectada.
Según describe, el hombre era agente de la Policía Local, aunque iba de paisano, y “a pesar de mis explicaciones de los hechos, y sin ni siquiera escucharme, decidió ponerme una multa por estacionar en zona señalizada para uso exclusivo de minusválidos”. Efectivamente, la tarjeta de minusválido no se correspondía con la matrícula del coche de la denunciada, sino con la del de su padre, pero al estar ingresado no podía hacer uso del mismo y necesitaba estacionar cerca de la puerta a causa del estado en que se encontraba después de la operación de cadera.
En este sentido, además de los 200 euros de multa, el agente le “ha retirado la tarjeta de minusválido a mi padre”, explica la hija, que lloraba desconsolada “por el trato recibido” por el agente de policía local.
Los hechos tuvieron lugar frente a la entrada del hospital general de Jerez, lugar donde se encontraba ingresado y esperaba su alta el dueño de la tarjeta de minusválido.
La intención de la joven era aparcar el vehículo a expensas del dictamen médico que le ofrecerían sobre las once de la mañana, “por si era necesario llevarme a mi padre de vuelta a casa”.
