Siete juzgados de Murcia, Lorca, Molina de Segura y Cartagena tomarán declaración entre hoy y mañana al más de medio millar de inmigrantes llegados desde el viernes a las costas cartageneras a bordo de 50 pateras, según el plan especial acordado por la Delegación del Gobierno y el Tribunal Superior de Justicia.
El delegado del Gobierno en Murcia, Francisco Bernabé, presidió anoche en el Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo de Cartagena una reunión del gabinete de crisis establecido ante la avalancha de pateras, que reunió a la alcaldesa de la ciudad, Ana Belén Castejón; al presidente del TSJ, Miguel Pasqual del Riquelme; presidente de la Autoridad Portuaria, Antonio Sevilla, y jefe superior de Policía de Murcia, Cirilo Durán, entre otros.
El delegado del Gobierno señaló que, tras la declaración judicial de los inmigrantes, en su gran mayoría argelinos, lo previsible es que pese contra ellos una orden de expulsión del país, que se ejecutará en el plazo de sesenta días.
Durante ese periodo, recordó Bernabé, los extranjeros permanecerán en alguno de los centros de internamiento existentes en España.
Dado el elevado número de personas que van a pasar a disposición del juez y las dificultades para su traslado a dependencias judiciales, se ha duplicado el número de funcionarios y profesionales que deben atender a los inmigrantes, que se desplazarán incluso fuera de los juzgados.
Para ello, se han habilitado unas dependencias judiciales en el polideportivo del Centro Integrado de Formación Profesional Hespérides de Cartagena, donde presentarán declaración algunos de los extranjeros asistidos por intérpretes y abogados del turno de oficio.
El dispositivo del TSJ también contempla la toma de declaraciones en los juzgados de guardia de Murcia, Lorca y Molina de Segura, donde permanecen alojadas parte de las personas llegadas en pateras.