La Policía Nacional ha detenido en el puerto de Almería a un ciudadano marroquí sobre el que pesaba una orden europea de detención y entrega (OEDE) emitida por Bélgica ya que mató a un agente de policía e hirió a su compañera en la fuga después de perpetrar un robo con violencia en 2001.
El arrestado, quien fue identificado en el control de entrada a los pasajeros de un ferry procedente de Nador, estaba siendo buscado por delitos de homicidio, fuga de centro penitenciario, contra la propiedad, tráfico de estupefacientes y tenencia ilícita de armas de guerra.
Según ha informado la Comisaría Provincial, la Orden Europea de Detención y Entrega advertía de que es altamente peligroso y que tiene pendiente cumplir un total de 29 años y diez meses en prisión por los numerosos actos delictivos cometidos en Bélgica.
Los hechos por los que el detenido era reclamado sucedieron entre julio de 1993 y enero de 1994 en las ciudades de Coutrai y Bruselas. Así, formando parte de una banda criminal participó en cinco atracos a mano armada contra bancos, oficinas de correos y empresas belgas, en los que obtuvieron un botín de unos dos millones de euros, además de dedicarse al tráfico de sustancias estupefacientes.
Una vez encarcelado por estos hechos, participó en una espectacular fuga de prisión, en Verviers, donde consiguió escapar junto con uno de sus compinches ayudado desde el exterior por el resto de la banda y empleando para ello explosivos.
Posteriormente, en abril de 2001 perpetró con otros dos delincuentes un robo con violencia dándose a la fuga en un vehículo robado. Durante la persecución abrieron fuego con un fusil de asalto Kalasnikov AK-47 contra un coche policial, matando a un agente e hiriendo a su compañera.