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Comienza la demolición de la estación de bombeo de la Menacha, en Algeciras

Las obras, que incluyen el encauzamiento y la nueva estación de bombeo, están presupuestadas en 1,4 millones

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Esta mañana han comenzado los trabajos para demoler la antigua estación de bombeo de aguas residuales de La Menacha, después de que haya comenzado a funcionar la nueva construida al otro lado del río. Las obras las acomete el grupo Alonso, y se enmarca en un conjunto de actuaciones que el equipo de gobierno puso como condición a la empresa para desarrollar su proyecto en esta ciudad.

El alcalde, José Ignacio Landaluce, ha estado presente en el arranque de los trabajos para conocer los detalles de los mismos, y le han acompañado la teniente de alcalde delegada de Emalgesa, Eva Pajares, el director de la empresa en Algeciras, Francisco Labra, el director de la obra, Antonio Silva, y técnicos de Emalgesa.

El alcalde ha resaltado el gran esfuerzo que está realizando el Grupo Alonso por dar satisfacción a todos los requerimientos de este equipo de gobierno para acabar con las inundaciones que históricamente se han producido en la Colonia San Miguel, al igual que se ha hecho en otros puntos del municipio. “A la empresa hay que exigirle pero no podemos dejar de reconocerle que desde que comenzó a actuar no ha vuelto a haber inundaciones en la zona”, manifestó el alcalde.

En este sentido recordó que desde tres años se han llevado a cabo varias limpiezas en el cauce del Cachón, desbroces en los márgenes, una nueva estación de bombeo y, ahora, la demolición del antiguo. “Estamos actuando donde nunca nadie había actuado y eliminando obstáculos, no sólo para mejorar el encauzamiento en previsión de futuras avenidas, sino para que incluso las más habituales no produzcan ningún daño”, indicó Landaluce.

También Eva Pajares incidió en que el derribo de este bombeo, que ha quedado en desuso una vez que el nuevo está en funcionamiento, se procederá a la demolición del colector en su último tramo. La delegada recordó que, cuando se instaló el Grupo Alonso, y empezó a pedir licencias para su proyecto, este equipo de gobierno no podía permitir que se ocasionara el menor perjuicio a los vecinos, por lo que se le plantearon a la empresa una serie de condicionantes. “Ellos estuvieron de acuerdo en colaborar, y lo han hecho y mucho, y debemos estar agradecidos por ello”.

La demolición de la antigua estación de bombeo está incluida en la décima fase de un proyecto global que además incluye el encauzamiento y la nueva estación de bombeo, y que cuenta con un presupuesto de 1,4 millones de euros.

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