Tras cruzar el umbral de la antigua Subdelegación del Gobierno, el visitante se encontrará con un impresionante patio porticado que anticipará el deleite de las joyas artísticas que lucirán en este imponente equipamiento cultural: las colecciones de Bellas Artes y Arqueología nutrirán las numerosas salas que componen la pinacoteca malagueña; unos fondos artísticos que llevan embalados desde 1997 cuando fue desalojado el Palacio de Buenavista para convertirse en el actual Museo Picasso Málaga, inaugurado en el año 2003.
En esta visita institucional, que ha contado con la presencia del ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo; la consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, Rosa Aguilar; el subdelegado del Gobierno en Málaga, Miguel Briones; el presidente de la Diputación, Elías Bendodo, y el alcalde Francisco de la Torre, quienes han sido asesorados durante el recorrido por la directora del museo, María Morente, se mostraron los avances en los trabajos de adaptación museística, que demuestran la “excelencia, la calidad y la excepcionalidad” que se está llevando a cabo en la pinacoteca.
Vestigios
La exhibición de los vestigios arqueológicos empiezan ya a tomar forma en la segunda planta del palacio. Las piezas escultóricas más voluminosas de la Colección Loringiana, tales como las conocidas matronas y la excepcional Thoracata, están distribuidas por la primera de las salas. Y es que este acervo histórico atesorado por la familia Loring en el siglo XIX fue el germen del Museo Arqueológico de Málaga y unido en el año 1973 al Bellas Artes, por lo que abrirá el recorrido expositivo de la sección de arqueología.
La museografía empieza a mostrar su mejor cara en las diversas salas expositivas, de forma que las vitrinas, las estanterías, los muebles, las peanas y las cristaleras que albergarán las colecciones artísticas conforman actualmente el paisaje del interior de La Aduana. En este paseo por el túnel del tiempo, hay que detenerse en el colosal enterramiento fenicio aparecido hace unos tres años en una excavación en la calle Jinetes. La tumba, que alojó a un guerrero del siglo VIII antes de Cristo, luce en todo su esplendor.
En palabras del conservador del Museo de Málaga, José Ángel Palomares, el casco en bronce del militar es de gran “belleza”, especialmente su “superficie esgrafiada”, y está siendo restaurado en el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH) junto con todo el ajuar mortuorio que acompañaban al finado como parte del ritual funerario, tales como un escarabeo y piezas cerámicas.
A pocos metros está instalada la fuente de época nazarí (siglo XIV) que apareció en las labores arqueológicas para la construcción del Museo Picasso Málaga en el palacio de la calle San Agustín, así como el impresionante mosaico romano de más de seis metros de largo de la época imperial (siglo I), denominado El nacimiento de Venus, que fue localizado durante unas excavaciones en el siglo XIX en el municipio de Cártama y estuvo expuesto en la zona de jardín del Palacio de Buenavista.
En la primera planta, el montaje de la museografía de la sección de Bellas Artes también avanza a buen ritmo. Las salas están definidas, el color de las paredes y se han adjudicado las futuras moradas de los lienzos que protagonizarán la inauguración del Museo de Málaga. Por su parte, el tercer piso estará dedicado a la biblioteca, que ya dispone de casi todo el mobiliario instalado además de la adecuación de los archivos bibliográficos. Allí también se han dispuesto los talleres de restauración de estos fondos artísticos, totalmente equipados y preparados.
Tras la visita, Méndez de Vigo se mostró “gratamente impresionado” por los trabajos ejecutados en La Aduana y aseguró que “Málaga sabrá apreciar hoy lo que hizo en su pasado”. A su vez, resaltó que tras la firma del protocolo por el que el Gobierno entregará las llaves a la Junta de Andalucía el próximo 1 de marzo, esta visita era “necesaria”, no sólo para que la ciudadanía vea la significación que tendrá el Museo para la ciudad, sino para poner de manifiesto que la cooperación leal entre instituciones es lo mejor que le puede pasar a los ciudadanos”.
Por otro lado, la consejera Rosa Aguilar, respecto a dar una fecha concreta de apertura, matizó que con la visita se ha comprobado que “quedan muchas cosas por hacer” y la “museografía todavía no está acabada”. “No vamos a correr para acortar un mes el plazo de apertura”, destacó Aguilar, que incidió especialmente en que se están “adelantando algunas cosas de concursos, mobiliario y otros elementos que necesita el Museo, pero otras no se pueden adelantar y se tienen que hacer a partir del 1 de marzo”, agregó la titular andaluza de Cultura.
