Vecinos de la barriada del Cobre han arreglado con fondos propios viales de una zona próxima a Chorrosquina. La actuación se produce una vez que se han asegurado, "gracias a la mediación del PSOE", aclaran los socialistas, que la reparación está fuera de los límites del parque natural de Los Alcornocales.
"Se ha resuelto un problema que venía agravándose con el paso del tiempo, debido a la falta de atención municipal y a las dudas de los propios residentes" mediante "un encuentro facilitado por el candidato del PSOE a la Alcaldía algecireña, Fernando Silva, y la concejala y parlamentaria andaluza, Rocío Arrabal, que ha servido para deshacer las dudas sobre la procedencia del arreglo", indican.
La delegación provincial de la consejeria de Medio Ambiente ha podido comprobar 'in situ' que "se pretendía realizar un parcheo de socavones en un camino asfaltado y en una calle de la zona de Majadal Alto, en la zona de Chorrosquina. En este lugar ya actuó el ayuntamiento en 2001, cuando el citado monte, de titularidad municipal, tenía la consideración de patrimonial".
El PSOE reclamó al gobierno local que "clarificara esta situación hace un año, mediante una moción presentada al pleno municipal en la que se relacionaban una serie de peticiones de la asociación vecinal, entonces presidida por Fernando Rojas. El gobierno local del PP no ha actuado nunca".
“Respondemos a esa petición expresada por Rojas y reiterada ahora por la actual junta directiva de la asociación vecinal. Lo que no tiene explicación es la despreocupación en este asunto del actual equipo de gobierno del PP, que no estaba dando ninguna respuesta a las peticiones de los vecinos”, afirma Silva.
La delegación provincial de Medio Ambiente sostiene que "las obras planteadas por los vecinos no son nueva ocupación de monte, y que se limitan a reparar lo ya asfaltado y a limpiar las cunetas para prevenir daños por agua".
“Ayudamos a solucionar un problema y prevenimos otros que pudieran producirse si no se mantienen estos viales para la seguridad de los vecinos”, concluye Fernando Silva.
