El piloto inglés de Fórmula 1 Lewis Hamilton (Mercedes) ha conquistado el Gran Premio de Estados Unidos, disputado este domingo en el Circuito de Las Américas, por delante de su compañero y rival por el título, Nico Rosberg, con lo que el británico da un paso más hacia su segundo Mundial, mientras que el español Fernando Alonso (Ferrari) sólo pudo ser sexto.
Hamilton metió siete puntos más, 24 en total, de diferencia a Rosberg en la clasificación general de un Mundial al que ya sólo le quedan dos carreras, aunque la última en Abu Dhabi tendrá puntuación doble. Antes de llegar a Brasil, el campeón del mundo en 2008 afianzó su candidatura en una carrera inteligente en la que salió desde la segunda posición y esperó su momento para adelantar al alemán.
En la vuelta 24/56, Hamilton pasó a Rosberg y a partir de ahí no soltó la cabeza para llevarse la victoria, la quinta consecutiva. Tercero en Austin (Texas) fue el australiano de Red Bull, Daniel Ricciardo. En cuanto a Alonso, el piloto asturiano de Ferrari se tuvo que pelear con media pista para sacar un sexto puesto meritorio dejando detrás a los McLaren y a un Sebastian Vettel, séptimo, que vivió una odisea en el circuito estadounidense.
La pelea por el título ya es cosa de dos de manera matemática. Ricciardo no pudo meterse entre la pelea de los dos Mercedes y el de Red Bull se queda ya sin opciones. El tú a tú este domingo entre Hamilton y Rosberg comenzó con el alemán mandando. La salida, sin percances entre los primeros, tuvo a los pocos giros un parón por un choque entre Adrian Sutil (Sauber) y Sergio Pérez (Force India). El 'safety car' para empezar parecía señalar hacia una carrera vibrante, pero lo cierto es que hubo poca emoción.
La pelea con los dos aspirantes tuvo su momento álgido en la vuelta 24. El británico pilló desprevenido a su compañero y se decidió por atacar. A partir de ahí no hubo más cambios. Antes, en la primera parada en 'boxes' no hubo percances y el alemán mantuvo su posición de privilegio, lo mismo que le hizo Hamilton en la segunda. El británico caminó sólido hacia un nuevo triunfo que aún así no le permite ser campeón en Brasil de manera matemática.
Por su parte, Alonso terminó con una apurada sexta posición, como apurado está su motor, dejando al menos por detrás a los McLaren, con el objetivo de asegurar la cuarta plaza de Constructores. El asturiano se puso quinto en la salida, un espejismo que tardó poco en desvanecerse ya que el ritmo de los cinco primeros: los Mercedes, Ricciardo, y los Williams de Felipe Massa y Valtteri Bottas --que terminaron cuarto y quinto-- eran inalcanzable.
A pesar de todo, Alonso se pegó con todo el que tuvo a tiro, Jenson Button, Kevin Magnussen y un Vettel desquiciado que vio pasar al asturiano hasta en dos ocasiones. El compañero de Alonso, Kimi Räikkönen, terminó decimotercero. Así las cosas, el Gran Circo salta a Brasil, dentro de siete días, con el Mundial entre dos y con todos los rumores de cara a la próxima temporada también cada vez más cerca de desvelarse.