El golfista español Sergio García se ha disculpado este miércoles por las declaraciones que realizó el martes, en la cena de entrega de premios de la Gira Europea, en las que dijo que serviría "pollo frito" a Tiger Woods, asegurando que se trató de una "broma" y que para nada fue un comentario "racista".
García, que no tiene buena relación con el número uno del mundo, realizó esas declaraciones cuando se le preguntó si invitaría a cenar a Tiger Woods en el Abierto de Estados Unidos, que se celebrará el próximo mes. "Le invitaremos todas las noches. Le serviremos pollo frito", indicó el español.
El comentario de García sentó mal debido a que antiguamente en Estados Unidos se decía que a los esclavos afroamericanos se les daba de comer todos los días pollo frito. Sin embargo, el golfista ha querido dejar claro que no era esa su intención.
"Me disculpo por cualquier ofensa que puede haber causado mi comentario durante la cena de entrega de premios de la Gira Europea. Respondí a una pregunta que me hicieron con una broma y fue un simple comentario tonto, pero de ninguna manera fue de un modo racista", explicó.