La Real Sociedad dio un pase de gigante para clasificarse para la Liga de campeones tras derrotar a un buen Valencia que se adelantó en el marcador pero que sucumbió a la monumental pegada que tiene este año el equipo guipuzcoano.
Los donostiarras quisieron marcar el territorio desde el minuto uno y en el inicio tuvieron ya una gran ocasión con un pase de costa a costa de Agirretxe a Vela que el mexicano culminó con un tiro intencionado al lado del poste de la portería defendida por Diego Alves.
El conjunto que entrena Ernesto Valverde quiso sumarse a lo que se presumía como una fiesta de fútbol ofensivo. En su primer acercamiento obtuvo un libre directo que ejecutó con maestría Mathieu y Bravo se lució para evitar el gol.
El Valencia quería la victoria, o mejor dicho la necesitaba porque el empate le dejaba a un triunfo de la cuarta plaza con cuatro partidos para el final de Liga y con una actitud pro activa para ello estuvo cerca de marcar en otro lanzamiento directo de Dani Parejo.
El equipo levantino, que estaba jugando con un nivel muy alto, encontró el premio a su insistencia en el minuto 25 cuando Cissokho asistió desde la banda a Soldado para que éste, de cabeza, esquivara la presencia de Bravo.
El partido estaba precioso y los donostiarras quisieron engrandecerlo todavía más antes del descanso con un soberbio gol del central Iñigo Martínez a pase de Chory Castro.
Valencia volvió por sus fueros en la segunda mitad, con mucha posesión y Soldado como quebradero de cabeza constante para los intereses defensivos blanquiazules.
Parecía más cercano el gol blanco que el donostiarra pero este año la Real está en un nivel supremo y en el minuto 73 logró uno de los goles más bonitos de la temporada.
Un saque falta a favor del Valencia se convirtió en una contra fulgurante de Chory Castro que en dos pases, con la cooperación de Agirretxe, se plantó sólo ante Diego Alves y lo batió por bajo.
Valencia lo intentó todo en su último esfuerzo pero la Real se cerró bien atrás y esperó su oportunidad al contraataque que le llegó a cuatro minutos para el final con el gol de Agirretxe.
Jonás acortó distancias y Agirretxe, con un gol de dibujos animados, en el descuento completó la goleada.