La pareja detenida tras serle intervenido un alijo de 8,6 kilos de cocaína en el vehículo con el que pretendían embarcar en el puerto onubense en el transbordador rumbo a Canarias en compañía de dos hijas menores de edad ha ingresado en prisión por orden judicial.
Según han informado a Efe desde la Guardia Civil, el juez, tras oirlos en declaración, decretó su ingreso en prisión preventiva imputándoles un delito contra la salud pública.
Los hechos ocurrieron el pasado sábado, en el control de embarque, donde agentes de la unidad especializada en el control de fronteras y tráficos ilícitos registraron el vehículo en el que viajaban estas cuatro personas.
Para verificar las sospechas de los analistas de la Guardia Civil, se realizó una entrevista personal con los dos ocupantes, un hombre y una mujer, vecinos de Valencia, que viajaban en compañía de dos niñas menores de edad, y que decían que iban a pasar unas vacaciones en las islas.
A pesar de la aparente normalidad que mostraba la pareja, disimulando sus intenciones al viajar con dos niñas pequeñas, no pudieron evitar que el perro detector de drogas que participaba en el dispositivo pudiera encontrar la droga.
Tras la detección de la droga se detuvo a la pareja, mientras que las dos niñas que les acompañaban, hijas cada una de uno de los integrantes de la pareja, fueron custodiadas hasta la llegada de un familiar que se pudiera hacer cargo de ellas, quedando ingresadas por orden de la Fiscalía en un centro de Huelva.
Se trata de la segunda intervención de cocaína que se produce en el muelle de pasajeros en poco tiempo, "lo que induce a pensar que se estaría abriendo esta vía de introducción de cocaína en Canarias, a través de nuestra provincia". Por ello se han implementado estos servicios de análisis, que se realizan tanto aquí como a la llegada del ferry a Tenerife.
