El próximo encuentro entre LFP y AFE se celebrará mañana a las 4 de la tarde, en la sede de la Liga, aunque los grupos de trabajo continuarán su labor desde por la mañana.
En la que fue la quinta reunión desde que se anunciara la convocatoria de huelga el pasado 11 de agosto por parte de los futbolistas, tanto unos como otros coincidieron en que se ha producido un intercambio de posturas, pero no hablaron claramente de avances.
Por otro lado, Augusto César Lendoiro, presidente del Deportivo, ha sugerido hoy la intervención del Gobierno y todos los partidos políticos para buscar una solución global a los problemas que tiene el fútbol.
"Tendrá que intervenir el Gobierno para que haya un acuerdo entre todos", declaró el presidente deportivista ante los medios de comunicación tras la presentación del centrocampista Borja Fernández.
El dirigente del Deportivo explicó que, en su opinión, mientras que los partidos políticos no se sienten con la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) y la Liga de Fútbol Profesional (LFP), los problemas del fútbol español no se resolverán.
"A lo mejor, ahora se parchea la situación, pero será un paso en falso y en un periodo corto habrá que variar un sistema que no vale, que está caducado", manifestó el rector deportivista.
Añadió que, "si pasa la huelga y no vale para nada, los problemas van a ser mucho más graves" y por eso insistió en que deben sentarse a negociar los tres actores: AFE. LFP y partidos políticos.
Lendoiro señaló que la patronal puede pensar que tiene razón porque "está dando lo que tiene y no puede dar más", pero el sindicato también puede llevar razón porque lo que le ofrecen "no le llega" y el Gobierno se puede quejar porque "los clubes tienen obligaciones pendientes con Hacienda y la Seguridad Social".
El presidente del Deportivo abogó por un cambio en el sistema de reparto de la Quiniela, "que es de la época de Franco", y por que se suprima el fútbol en abierto, que reportaría a los clubes unos "veinte, treinta o cuarenta millones de euros", como paso previo para que haya una solución global.
"Devuélvame los derechos usurpados y yo me comprometo a cumplir las obligaciones con Hacienda y la Seguridad Social y con los jugadores vamos a buscar también un sistema", dijo Lendoiro.
El dirigente deportivista expresó su temor de que "la huelga se pueda enquistar y llegar a mayores niveles en el futuro" si no hay un pacto, apuntó que "la situación para los clubes también es límite" y declaró que es "imposible" llegar a las pretensiones de los futbolistas.
"Las soluciones que se piden son imposibles de alcanzar, incluso serían imposibles teniendo dinero", indicó Lendoiro, que "no ve salida a la problemática" que se está "viviendo".