Éstas son las conclusiones a las que ha llegado la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC) en el informe definitivo del accidente, en el que murieron 154 personas, publicado ayer.
La presidenta de la comisión, Rosa María Arnaldo, señaló, en rueda de prensa, que el accidente se debió a la confluencia de tres circunstancias: los alerones empleados para aterrizar y despegar no se desplegaron, la tripulación no utilizó las listas de chequeo y el sistema de alerta no funcionó.
Arnaldo explicó que la tripulación perdió “varias oportunidades” de hacer las comprobaciones pertinentes que habrían impedido el accidente, y que ello pudo deberse a las prisas ocasionadas por el retraso en el vuelo –denominó a esta circunstancia “síndrome hurry up”–, que había sufrido una avería en la sonda de temperatura (RAT) previa al despegue.
El secretario de Estado de Transporte, Isaías Táboas, comentó a los periodistas que el informe no busca delimitar responsabilidades, sino esclarecer las causas que motivaron el accidente, ya que es el juez quien debe entrar a juzgar esa “responsabilidad” y decidir de quién es.
Por su parte, Spanair no quiso realizar ningún tipo de valoración sobre el informe elaborado por la comisión de accidentes.
El informe de la Ciaiac publicado ayer señala que la tripulación no detectó el error de configuración ni “identificó los avisos de pérdida ni corrigió esa situación después del despegue”, lo que causó un deterioro de las condiciones de vuelo.
Entre los factores que contribuyeron al accidente se apunta que no hubo un aviso de configuración incorrecta porque el TOWS (sistema que alerta en estos casos) no funcionó.
A juicio de la comisión, la tripulación de Spanair no llevó a cabo la acción de seleccionar los flaps/slats con la correspondiente palanca de mando, ni realizó la comprobación cruzada de la posición de la palanca y el estado de las luces indicadoras de esos dos elementos.
Tampoco comprobaron de forma visual la ejecución final correspondiente a la posición de los flaps/slats, tal como mostraban los instrumentos de la cabina de vuelo.