“Aquí no tenemos solamente un contexto belicoso, aquí estáis involucrados en batallas como las que se dan en la guerra. Ésta es para nosotros una situación totalmente nueva”, aseguró la canciller ante cientos de soldados alemanes destacados en las instalaciones militares de Kundus.
Merkel se refirió así a los cuatro días de violenta lucha que libraron soldados alemanes y talibanes en el problemático distrito de Char Darah, en el norte del país, el pasado noviembre.
“Algo así sólo lo conocíamos hasta ahora por los libros”, agregó la canciller.
La visita de Merkel, que tiene como objetivo “agradecer” a las tropas el trabajo que están realizando en Afganistán, se vio precedida por la muerte de un soldado alemán de 21 años en un “trágico accidente”, según la canciller.
“La razón por la que estoy aquí es para daros las gracias. Sabemos que ésta es una situación extremadamente peligrosa”, aseguró.
En lo que va de año, ocho soldados alemanes han muerto en Afganistán, el peor registro desde el inicio de la guerra, con lo que ya son 45 los efectivos de las tropas germanas fallecidos en este país.
Merkel reconoció en su discurso que el pueblo alemán se muestra “parcialmente escéptico” con la misión que desarrollan las tropas alemanas.