Según ha informado el sindicato UGT en un comunicado "las más de 60 empleadas comenzarán un paro general", aunque se han cerrado los servicios mínimos con el Ayuntamiento, entienden que "poco a poco la situación irá empeorando".
El Ayuntamiento negocia con FCC, concesionaria del servicio, el abono de la deuda, que supera el millón de euros, pero de momento no ha logrado resultados y el comité de empresa dice estar ya "cansado", de tantas promesas y excusas de las dos partes, por lo que han decidido, tras llevar a cabo un encierro y varias manifestaciones de protesta en los últimos meses, llegar a la huelga indefinida.
Decisión que ratificaron tras no poder alcanzar un consenso, debido a la ausencia de representantes municipales en un Sercla celebrado hace unos días