El presidente en funciones de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha calificado el acuerdo regional alcanzado entre PP y Vox como un "pacto entre perdedores", pero "legítimo", al tiempo que ha subrayado que habrá una transición de poderes "absolutamente ejemplar".
Así lo ha manifestado a preguntas de la prensa antes de participar este sábado en la toma de posesión del nuevo presidente de la Diputación de Cáceres, el socialista Miguel Ángel Morales, que ha tenido lugar en el Palacio Provincial en la capital cacereña.
“El hecho de que haya un pacto entre perdedores para echar al PSOE del Gobierno regional, como ellos dicen, puede no ser ético, estético y puede significar faltar a la palabra, pero, en cualquier caso, es legítimo y no cabe por parte de un demócrata convencido, como yo, nada más que respetarlo”.
Ante este nuevo escenario, la presidenta de la Asamblea, Blanca Martín, debe iniciar una ronda de contactos, en la que le trasladará "dejar sin efecto la posible investidura mía y convocar una investidura para elegir una nueva presidenta de la Junta de Extremadura", ha añadido Vara.
En este contexto, el presidente en funciones ha insistido en esa “transición modélica” de poderes, “sin duda”, además de asegurar que así se lo ha trasladado tanto a la presidenta del PP extremeño y próxima presidenta regional, María Guardiola, como al líder de Vox, Ángel Pelayo Gordillo.
El presidente saliente ha hecho hincapié en que el nuevo gobierno se encontrará con una realidad extremeña “totalmente distinta” y ha mencionado la bajada del paro y una notable caída del absentismo escolar, entre otros logros alcanzados.
“Me voy con la conciencia tranquila y la tranquilidad del deber cumplido; con las manos limpias", ha dicho.
Preguntado por la nueva consejería que gestionará Vox, la de Gestión Forestal y Mundo Rural, Vara ha declinado hacer declaraciones por tener “el mayor respeto institucional posible”.
