El tiempo en: Ronda

En román paladino

Del comunismo a la democracia

Lo destacado de la situación presente es la dificultad de las nuevas naciones provenientes del espacio soviético para mantener un  sistema democrático

Publicado: 12/01/2022 ·
09:58
· Actualizado: 12/01/2022 · 09:58
Publicidad Ai Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Putin. -
Autor

Rafael Román

Rafael Román es profesor universitario, miembro del PSOE, exconsejero de Cultura y expresidente de la Diputación de Cádiz

En román paladino

El autor aborda en su espacio todos los aspectos de la actualidad política tanto de España, Andalucía y la provincia de Cádiz.

VISITAR BLOG

Putin está de los nervios. El presidente ruso no asume la historia reciente de su propio país y tiene el síndrome de la recuperación de la Unión Soviética o de lo que fue “el espacio soviético”, comenzado por los zares y terminado por el Ejercito Rojo. Por eso establece cuantos enclaves puede en las antiguas repúblicas, ex soviéticas, en el perímetro de Rusia, y envía tropas a Bielorrusia, Ucrania, Kazajstán, Armenia… se reapropia de Crimea, etc.

Cuando cayó el muro de Berlín y  se desintegró el Pacto de Varsovia y, finalmente, se liquida por  Boris Yeltsin la Unión Soviética, -con la escena televisada mundialmente de la   humillación a Mijail Gorbachov-  quedó claro que Rusia es la que descompone la URSS. Yeltsin se queda con todo el armamento nuclear soviético y hace sustituir a la  Unión Soviética por Rusia en el Consejo de Seguridad de la ONU. La serie de países que los pactos de Yalta y Postdam habían establecido entre los vencedores de la Segunda Guerra Mundial -y que Stalin había incumplido sistemáticamente- empiezan sus caminos hacia la independencia de la URSS, porque, entre otras cosas, el Partido  Comunista  de la Unión Soviética (PCUS) -que era el armazón que lo controlaba todo-  también fue disuelto y sus bienes confiscados. Comenzó como el título de una obra de Helene Carrere d’ Encause: “La gloria de las naciones o el fin del Imperio Soviético”.   Acabaron  los imperios  egipcio, romano, el Sacro Imperio, el español,  el británico, …y  Robert Kaplan escribió un libro sobre el “Viaje al futuro del imperio. La transformación de Norteamérica en el siglo XXI”. Ya anuncia que “la existencia continuada de Estados Unidos no debería darse por supuesto  en ningún caso”. Ahora la que se asoma para continuar el ciclo en pocos decenios es el Imperio del Centro, China. 

Lo destacado de la situación presente es la dificultad de las nuevas naciones provenientes del espacio soviético para mantener un  sistema democrático. Está sucediendo hasta con los países que se han incorporado a la Unión Europea: Polonia, Rumanía, Bulgaria, Hungría…Stalin no permitió elecciones libres cuando las ocupó y, ahora, tienen dificultades serias para  aceptar los postulados democráticos plenamente. En la Asia post soviética es mucho peor. Clanes familiares y de poder mafioso ocupan descaradamente el poder. La UE, a la espera y desairada.

 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN